El Valencia Basket disputará el título de la Liga ACB ante el Real Madrid tras clasificarse esta noche para la final. Lo hará tras haber finiquitado la semifinal ante el Baskonia en el cuarto partido por 85-75 y dejar la eliminatoria en un decisivo 3-1. Las dos victorias consecutivas en La Fonteta, tras ganar el primer encuentro y perder el segundo en Vitoria, han resuelto una serie que partía con el factor cancha a favor de los alaveses. El primer partido de la final, que se jugará también al mejor de 5 partidos, será el viernes en Madrid. El conjunto blanco tiene el factor cancha a favor.

Esta será la segunda final de la ACB del Valencia Basket, que ya la jugó en 2003 ante el Barcelona. Entonces, perdió 3-0. Y esta será la tercera final del club taronja esta temporada. Las ha jugado todas: Copa, Eurocup y, ahora, la Liga, con derrotas en las dos primeras ante el Real Madrid y Unicaja, respectivamente. Pero llega a la final con dos victorias supremas ante el Barcelona y el Baskonia, nada menos.

Liberado de presión, consciente de jugar a favor de corriente, el Valencia Basket practicó un baloncesto limpio y efectivo. Ejerció un extraordinario trabajo defensivo y buscó el aro contrario con el aire de suficiencia necesario para liderar el partido. Sato abrió el partido con dos triples, un síntoma del estado psicológico de su equipo. Con mucho acierto y una sólida defensa, el conjunto taronja tomó el mando en el marcador. Mandaba por 15-4 en el minuto 7, con un Oriola especialmente efectivo. El Baskonia, liderado por el acierdo de Larkin (9 puntos), recortó distnaicas (23-17 al final del primer cuarto).

Los rebotes (11-5 para los taronja) y la alegría en el juego impulsaron de nuevo al Valencia Basket en el segundo cuarto. Oriola se fue hasta los 10 puntos y el Baskonia sufrió especialmente en el juego interior. Al minuto 15, el equipo de Pedro Martínez alcanzaba su máxima ventaja (36-23) y se mantuvo con esas diferencias hasta el descanso (43-32). Pintaba muy bien y la dirección del juego de Diot, que no es un base puro, resultó fundamental. El francés firmó un partido excelso. Vives, renqueante de un esguince en el tobillo, tuvo un papel más secundario.

La Fonteta, muy sabia, esperaba la reacción del Baskonia. No podía poner las cosas fáciles y puso un nudo en la garganta al público mediado el tercer cuarto, con un parcial de 0-7. El equipo alavés se colocóa 6 puntos (52-46). Respondió con valentía el Valencia Basket, primero con un triple de Diot y a continuación con otro, espléndido, de San Emeterio (58-38), que volvió a estar a la altura. San Emeterio ya era el máximo anotador (15 puntos). El resultado al final del tercer cuarto (62-52) y, sobre todo, la entereza colectiva del equipo taronja, invitaban a pensar en la final.

Un triple de Vives, de nuevo en pista, abrió el último cuarto (65-52). La misión de Pedro Martínez era la de conservar la ventaja. Jugar pausado, sin prisas, sin caer en el error. A 5 minutos del final, la tensión no era extrema (71-61), pero no había nada decidido. La tranquilidad sólo se vio interrumpida por la falta antideportiva de Sato a falta de 2 minutos. El Valenica Basket mandaba de 12 y el Baskonia se situó a 9. No hubo más demorar. Un triple de Thomas dejó todo cerrado.