«Txus» Vidorreta Gómez (Bilbao, 1966) se quedó sin tiempo para soplar las velas. El técnico, que ayer cumplía 51 años, se despidió a mediodía y entre lágrimas del Iberostar Tenerife en una rueda de prensa cargada de emoción. Apenas unas horas más tarde, fresco todavía el adiós de Pedro Martínez, el Valencia Basket hacía oficial su incorporación como nuevo entrenador hasta el 30 de junio de 2018. Su fichaje fue tan veloz que el vasco se estrenará hoy mismo como empleado taronja en Barcelona, donde asistirá a una reunión de los entrenadores de la próxima Euroliga, competición en la que debutará esta nueva temporada. Para la presentación oficial, eso sí, habrá que esperar al viernes (12.30 h.). Será en un acto que el club tiene previsto celebrar en una tienda de la Plaza del Ayuntamiento de València.

Vidorreta toma así los mandos de la nave de la Fonteta con la credencial de la experiencia y, sobre todo, el rendimiento que ha exprimido al Iberostar Tenerife durante los dos últimos cursos.

Por un lado, el vizcaíno acumula 26 años de trayectoria en los banquillos españoles, desde que tomó las riendas del cadete del Caja Bilbao en 1991. Además, en los últimos 13 ha sido un fijo en los banquillo de la ACB, en la que debutó en 2004/05 con el Bilbao Basket, al que clasificó por primera vez para el Playoff en la temporada 2007/08 y con el que obtuvo una plaza para la Eurocup el año siguiente.

En 2010, tras unos meses sin equipo, llegó al Meridiano Alicante, donde sólo los problemas económicos de la entidad frenaron su recorrido dos años después. Vidorreta empezó entonces una etapa de tres campañas en el Estudiantes, el paso previo a su fichaje, en 2015, por el Iberostar Tenerife, al que estuvo a un partido de meter en el Playoff en su primera campaña.

La mejor defensa de la ACB

En esta última temporada, Vidorreta consiguió que el Iberostar Tenerife entrara en la Copa del Rey como cabeza de serie, ganara la Basketball Champions League de la FIBA, liderara la liga durante ocho jornadas y acabara quinto con 22 victorias y la mejor defensa del campeonato (72,3 puntos de media).

Por todo ello, el bilbaíno dejó ayer Tenerife emocionado, todavía sin desvelar su nuevo destino. «Me voy a un equipo de alto nivel europeo, pero lo importante no es llegar sino mantenerse», afirmó. Vidorreta tenía firmado un contrato de dos años con el club canario desde la pasada campaña, pero con una cláusula de salida que ha hecho efectiva estos días. De hecho, a lo largo de las últimas semanas, tanto el presidente del Iberostar Tenerife, Félix Hernández, como el propio entrenador, habían insinuado su salida si un equipo de Euroliga le ofrecía un mejor contrato. Ese equipo ha sido el Valencia Basket.

Con esta apuesta, el club valenciano apenas cambia la filosofía que se ha consolidado estos últimos tiempos con Pedro Martínez. Como el catalán, Vidorreta prima la fuerza del bloque a las individualidades y se aferra al esfuerzo del colectivo para conseguir las victorias. Por eso, cuando en diciembre una lesión dejó en el dique seco a Beirán, el mejor jugador del Tenerife y que promediaba más de 11 puntos por partido, el equipo de Vidorreta no sólo no lo acusó sino que mejoró sus números defensivos y encadenó varios triunfos consecutivos. La clave fue el reparto de minutos y de las responsabilidades ofensivas.

Obsesión por el «scouting»

Sobre su estilo de juego, desde las islas apuntan que es un especialista en preparar «trampas» defensivas a los rivales mediantes constantes cambios de situaciones de juego. Puede cambiar la manera de defender varias veces para confundir al contrario. Esa estrategia está basada en un intenso trabajo de pretemporada (el verano pasado perdió con el Tenerife los seis partidos de preparación antes de iniciar la liga) y una gran labor de «scouting», una de las obsesiones de Vidorreta. En este punto, el vasco ha contado con la ayuda de su cuerpo técnico, que ha pasado muchas horas en los aeropuertos para estudiar de cerca a todos los equipos a los que se han enfrentado. En cuanto al ataque, Vidorreta apuesta por agotar el tiempo de las posesiones y mover mucho el balón en busca de tiros liberados. No en vano, el Tenerife es uno de los clubes de la ACB con más lanzamientos y mejor promedio de triples.

Un periodista con carisma

En lo extradeportivo, Vidorreta sabe dominar el escenario. A su experiencia sobre el parqué, el técnico suma una fuerte personalidad y un carisma que sabe contagiar en la plantilla. Fue periodista en Radio Bilbao, profesión que abandonó por su romance con el baloncesto con un par de asignaturas por aprobar que le hubieran permitido acabar la carrera. Quizá por ello sabe producir y colocar los mensajes adecuados dentro y fuera del vestuario. Prueba de ello ha sido su capacidad para que la afición tinerfeña se volcara con sus jugadores.

Tratará de hacerlo ahora en la Fonteta, con un equipo de Euroliga y campeón de la ACB. Todo un reto.