El Valencia CF se ha lanzado a por el medio centro defensivo del Inter de Milán, Geoffrey Kondogbia. El francés se ha convertido en el gran objetivo del equipo que entrena Marcelino García Toral, aunque la jugada es complicada porque el centrocampista tiene muchas novias y el club juega con la desventaja de que la temporada próxima no jugará una competición económica y, además, su oferta económica podría ser inferior. Kondogbia cobra cerca de cuatro millones de euros, cifra que para el Valencia CF es prohibitiva.

Ayer se apuntaba en Italia que el Inter de Milán y el Valencia CF estaban cerca de un acuerdo para la cesión de Kondogbia con una opción de compra, operación que se adaptaría más a lo que la entidad de Mestalla puede acometer en sus circunstancias económicas.

El traspaso ayer de Diego Alves al Flamengo por cerca de medio millón de euros no supone una gran entrada de dinero para el Valencia CF, pero sí que es mejor noticia para el fair play financiero porque se trata de un jugador que ya estaba amortizado y se ahorra una ficha anual de unos tres millones brutos cuando aún le quedaban dos temporadas de contrato. Con el poco margen de maniobra que tiene el Valencia CF la salida de Alves le proporciona un balón de oxígeno para acometer nuevas incorporaciones.

Ahora la pelota está en el tejado del francés, que debe valorar los ofrecimientos que tiene y el del Valencia CF quizás sea el más endeble por el dinero que le puede ofrecer y por no jugar ni la Champions League ni la Liga Europa.

El fichaje de un medio centro defensivo, sea Kondogbia u otro, es indispensable para Marcelino, toda vez que actualmente la plantilla no cuenta con un jugador de esas características: Dani Parejo, Carlos Soler, Medrán y Maksimovic no son un «6», más bien son jugadores que juegan por delante del pivote defensivo, aunque los tres primeros actuaron en esa posición la temporada pasada. El serbio también se desenvuelve mejor en la posición de «8».

Ideal para Marcelino

Por eso, el técnico asturiano pidió al llegar al menos un centrocampista de corte defensivo, indispensable para su esquema táctico. Y Kondogbia tiene las característica que reclama Marcelino: presencia física impresionante, carácter ganador, capacidad de liderazgo y hasta un buen manejo de la pelota.

Kondogbia ya conoce la liga española porque militó en el Sevilla durante la temporada 2012-2013, en la que disputó 40 partidos y marcó un gol. Después recaló en el Mónaco antes de fichar por el Inter de Milán.