La Comisión Europea lo dejó ayer muy claro: la sanción de 23,1 millones de euros impuesta al Valencia la deberá pagar el club y no el máximo accionista, Peter Lim. El informe de la CE había dado lugar a varias interpretaciones respecto a quién debía hacerse cargo de la sanción, resultado del aval público que recibió el Valencia en su ampliación de capital de 2009, que terminó con la mayoría accionarial en manos de la Fundació Valencia CF.

Compromís formuló la pregunta para concretar quién deberá abonar la sanción millonaria, una contingencia que en su día el Valencia había provisionado en mucho menos dinero. «La recuperación será exigible a la empresa beneficiaria de la ayuda ilegal; en este caso, el Valencia Club de Fútbol. El papel de la Comisión es garantizar que España recupera de la entidad jurídica Valencia Club de Fútbol —independientemente de la identidad de sus accionistas o de la forma en que el beneficiario de la ayuda lo financia— el importe que debe reembolsarse», responde la CE.

El escrito, además, recuerda el motivo de la sanción. «La recuperación es la consecuencia lógica de la constatación de que una determinada ayuda es ilegal e incompatible. La finalidad de la recuperación no es castigar, sino restablecer la situación que existía en el mercado antes de la concesión de la ayuda ilegal».

El Valencia pidió la suspensión cautelar del pago, una sanción impuesta porque considera que el club recibió «ayudas públicas ilegales concedidas por España» y cuya fecha tope para pagar estaba marcada para finales de noviembre. La entonces presidenta del club, Layhoon Chan, anunció que el club había presentado un recurso contra la reclamación de la UE, al considera que la cantidad exigida era «usura» e insistió en que no hubo ayuda de Estado en la garantía bancaria recibida en 2009.

Una respuesta que no ayuda

Tanto el Valencia como el Instituto Valenciano de Finanzas (IVF), el organismo que avaló aquel crédito de 75 millones de euros, están pendientes de la resolución de la CE. «En caso de que sea confirmada, tendremos que ir a cobrar de manera efectiva e inmediata», aseguró en su día el director del IVF, Manuel Illueca.

La respuesta de la CE sólo puede ser interpretada, de momento, como perjudicial para el Valencia.