Pelayo reabrió ayer sus puertas. Y lo hizo por todo lo grande: con unas instalaciones que conjugan la tradición y la modernidad y para rendir tributo al mítico Rovellet, que recibió la medalla de oro del trinquet. Figuras como Genovés asistieron al homenaje, ante la presencia del presdente de la Generalitat, Ximo Puig. En la partida principal de la tarde, Puchol II derrotó a Genovés II.