Sete Gibernau dio a España el primer triunfo en el Circuit Ricardo Tormo, en 2001. Fue su primera victoria en el mundial de velocidad. En una carrera extraña y viciada por la elección de los neumáticos al principio de la misma, Sete Gibernau quiso aprovechar su oportunidad y forzó el ritmo al límite del riesgo en una pista que, después de treinta vueltas, todavía se encontraba mojada en algunas zonas para conseguir la victoria por delante del brasileño Alex Barros y de su compañero de escudería y actual campeón, el estadounidense Kenny Roberts.

Gibernau dedicó aquella victoria a los bomberos de Nueva York, en homenaje al gran trabajo que realizaron en el atentado terrorista de las Torres Gemelas.