La expedición del Valencia Basket desplazada a Tel Aviv se vio sorprendida por el aumento de la tensión a nivel internacional tras el anuncio del presidente de los Estados Unidos Donald Trump de reconocer a Jerusalén como capital de Israel. La plantilla no se vio afectada en su rutina de entrenamientos ni tampoco en el hotel donde ha estado alojado. El propietario del club Juan Roig, quien ha acompañado al equipo hasta este viaje, realizó con normalidad la excursión programada ayer a la propia Jerusalén junto a los casi 200 aficionados que arroparon los suyos en las gradas del pabellón del Maccabi. El propio club israelí reconoció a Levante-EMV que el nivel de seguridad se aumentó ligeramente en el partido de ayer aunque no se hizo un despliegue extraordinario. Los seguidores valencianos y los medios de comunicación desplazados a Tel Aviv estuvieron custodiados permanentemente por el servicio de seguridad del Maccabi como medida preventiva. El Valencia Basket partirá esta mañana hasta el aeropuerto de Manises, donde tiene previsto llegar a primera hora de la tarde.