La actual campeona de España de ajedrez, la grancanaria Sabrina Vega, ha decidido no acudir al Campeonato del Mundo de partidas rápidas y semirrápidas que se está celebrando en Ryad (Arabia Saudí) por la falta de tiempo para mentalizarse ante las normas del país y poder competir a máximo nivel. Al igual que la selección nacional femenina, Vega declinó acudir al país oriental por la discriminación que las mujeres sufren en este territorio. La española no es la única en sumarse a la lucha feminista. Las campeonas mundiales en diferentes categorías, las hermanas ucranianas Anna y Mariya Muzychuk, decidieron no defender sus dos títulos por las mismas razones que las españolas. La batalla por las 64 casillas abre un frente sobre los derechos de la mujer.

La Federación Internacional de Ajedrez (FIDE) tenía previsto realizar la disputa del actual Mundial en Qatar. El país de los petrodólares demoró su respuesta, y ante la falta de una sede donde llevar el campeonato, apareció la propuesta de Arabia Saudí. Además de las normas que obligan a las mujeres a cubrirse el cabello y a no salir solas a la calle, la organización denegó los visados a la delegación israelí.

Vega argumenta que el motivo por el que otras deportistas decidieran acudir es porque «evidentemente, las condiciones económicas han sido las mejores hasta el momento en un Mundial de este tipo. El montante de premios era muy atractivo. Yo no voy porque me niego a ceder ante ciertas reglas de conducta», dijo Sabina.