«Hemos vuelto a nacer», confesó el técnico del Valencia CF, Marcelino García Toral, tras el brutal accidente que sufrió el pasado 24 de diciembre cuando su coche, en el que viajaba con su madre y su esposa, chocó contra un jabalí en la autopista AP-68 a su paso por Logroño. Un esguince cervical y el cuerpo molido han retrasado su incorporación a los entrenamientos del Valencia, que prepara el partido de ida de octavos de final de la Copa de mañana miércoles ante Las Palmas (21.00) en el estadio de Gran Canaria. Estos son los siete retos en 2018 de Marcelino, a la espera de reincorporarse el jueves a los entrenamientos.

Máximo rendimiento

Todos los jugadores del VCF han rendido a tope en esta primera parte de la Liga 2017-18, y el entrenador aspira a que sigan así. Las lesiones de Murillo, Guedes, Garay y Carlos Soler mermaron el potencial, pero el técnico los irá recuperando. La vuelta de Soler, apartado por un esguince de tobillo, es clave. Cabe recuperar la contundencia en las dos áreas.

Goles como soles

Hay cinco equipos con menos goles encajados que el VCF (Barça, Atlético, Madrid, Leganés y Getafe). Se trata de rebajar los tantos en contra (17), y prolongar la productividad anotadora (36), el 2º máximo goleador tras el Barça.

Competitividad

Ante el Villarreal, en el último partido de 2017, Marcelino solo efectuó un cambio pese a ir perdiendo: entró Santi Mina por Lato. Fue la excepción a la regla: el equipo siempre mejoró con los cambios del técnico asturiano. La competitividad en la plantilla debe mantenerse muy alta. Tras las marchas de Orellana (Éibar) y Róber Ibáñez (Getafe), el VCF necesitaría algún refuerzo (Sandro o Vietto) para seguir exprimiéndose.

Buen ambiente

La limpieza en verano del vestuario, tras las marchas de Enzo Pérez y Diego Alves, ha permitido a Marcelino mantener un vestuario sano, con el liderazgo positivo de Parejo, sin nadie que emponzoñara el ambiente. Ese clima es imprescindible para que el equipo se esfuerce como hasta ahora.

Comunión con Mestalla

MestallaEn contra de todos los tópicos, el público de Mestalla se puso en pie para aplaudir a sus jugadores tras caer ante el Villarreal (0-1) y pese a perder tres de los últimos cuatro partidos. La honradez del cuadro de Marcelino ha generado una comunión mágica con la grada de Mestalla, que cree en el equipo incluso en la derrota. Marcelino debe mantener esa llama.

Un mes decisivo

Mientras recupera algunos lesionados, enero decide las aspiraciones del VCF, que juega los octavos y, si pasa, los cuartos de final de la Copa, además de cuatro partidos de Liga ante el Girona, Dépor, Las Palmas y Real Madrid.

Planificar el curso que viene

El club necesita vender jugadores por un mínimo de 45 millones y, al mismo tiempo, ganar competitividad en la plantilla, tarea complicadísima que está otra vez en manos de Marcelino y del director general, Mateu Alemany. Su efectividad en el pasado mercado estival invita al optimismo.