Ya fuera de la Euroliga, tras la derrota del jueves ante Baskonia (71-81), el Valencia Basket centra todos sus esfuerzos a partir de ahora en la Liga y, a ser posible, en repteir el camino del curso pasado, cuando fue segundo el torneo regular y acabó levantand el título ante el primer clasificado de esa fase previa, el Real Madrid.

Empatado en el segundo puesto de la Liga con el Barça y el Baskonia, los tres con 14 victorias y a cinco de un ya despegado Real Madrid, el conjunto de Txus Vidorreta quiere quedar al menos por delante del Unicaja para confirmar su presencia la próxima temporada en la Euroliga (Real Madrid, Barcleona y Baskonia tienen la presencia asegurada).

Más estabilidad

El técnico vasco recibe el domingo en la Fontenta a uno de sus exequipos, el Bilbao (18.00), club donde se formó. El Valencia Basket necesita más estabilidad en su juego como se demostró el jueves, en el duelo perdido a última hora frente al Baskonia en Euroliga.

Hubo buenos momentos de Guillem Vives, pero no lo suficientes. El base catalán precisa jugar bien más tiempo: consistencia. Debido a las ausencias de larga duración de Diot (la rodilla) y Van Rossom (la espalda), el VBC ha adolecido de falta de equilibrio. Sergi García es demasiado joven y Alberto Abalde está fuera de sitio. El pívot Latavious Williams está lejos de una forma aceptable. La idea es llegar todos (o la mayoría) a tope al tramo decisivo.