En pleno debate sobre el himno o la canción conmemorativa para que se escuche en Mestalla a partir del centenario del club, ha surgido la candidatura, defendida por aficionados y secundada también por cantantes como Jorge Martí, vocalista de La Habitación Roja, de "Un beso y una flor".

La canción, uno de los temas inmortales de Nino Bravo, no es desconocida para los aficionados del Valencia en un terreno de juego.

De transmisión y conocimiento intergeneracional, el pasado verano los integrantes de la peña Valencianista de Ginebra, valencianos que emigraron hace décadas a Suiza, la entonaron después del partido que midió a los jugadores de Marcelino García Toral con el Sporting de Portugal, en la localidad suiza de Martigny.

La letra de la composición del recordado cantante de Aielo de Malferit tiene un contenido que evoca la nostalgia provocada por la distancia y apela también a la identidad, con fragmentos extrapolables a metáforas futbolísticas.