A Vicent Ferré Cabanes le llamaban «Sento el bruto». Era un extremo izquierdo que no siempre distinguía la pelota de los tobillos de los laterales rivales. Amador Peris era un carrilero que se desplegaba por toda la banda derecha sin que le cayera la boina, porque aquel football rudo también admitía concesiones a la estética. Y de Pepe Llobet se decía que fue el primer jugador que marcó un gol con la camiseta del Valencia FC, en el campo de Algirós y contra el Gimnástico, en el verano de 1919. Los «granotes» protestaron porque entendían que la pelota no rebasó del todo la línea. Eran tres jugadores valencianos que conformaron la primera plantilla del murciélago en 1919. La imagen de los tres, en el telón del auditorio del Palau de les Arts, se fue abriendo para que aparecieran sus dignos herederos. Tres chicos de Foios, Pedreguer y València que cien años después sostienen el mismo relato. Ferran Torres, José Gayà y Carlos Soler aparecían con la indumentaria del Centenario. Se presentaron como marcaban los estatutos redactados en plenas fallas en 1919: «El uniforme es obligatorio para todo socio jugador y estará formado por camisa de sport y pantalón, ambos blancos». Y medias negras.

Entre todas las imágenes, fue la más impactante de un acto que salvó algunos matices (como el minoritario valenciano o el excesivo protagonismo de la banda Bombai), con voltaje emocional con la erudición del conductor Paco Lloret, los recuerdos evocados por el actor Enrique Arce y una apelación directa a la cantera no ya como gasolina nostálgica o folklórica, sino como el motor que debe guiar al Valencia CF del siglo XXI. Así se recordó en los vídeos, en los testimonios de Soler, Ferran y Gayà, en la numerosa presencia de exfutbolistas en las butacas o en el discurso de Anil Murthy. «La cantera es el futuro que va a permitir al Valencia sobrevivir a los retos del mercado y alcanzar la excelencia». La alocución de Murthy tenía también una implícita lectura autocrítica, al afirmar que se debía evitar caer «en la tentación de los milagros rápidos», justo en los que Peter Lim cayó en sus primeros años como máximo accionista.

«Hay clubes que tienen presupuestos enormes, venden camisetas en todo el mundo y el centenario marca una oportunidad para reflexionar sobre el futuro de este club: tenemos que ser uno de los mejores en Europa, hay que estar en Champions o en cualquier competición top que haya. Debemos mantener nuestras raíces para diferenciarnos de la competencia y contamos con una gestión profesional que afronta sin miedo los retos, que da estabilidad y confianza, que apuesta por la cantera y las estrellas de la casa».

Murthy aseguró que «el centenario pertenece a todos los valencianistas, los valencianos y a la ciudad y a todos los vamos a involucrar en las celebraciones» y anunció que habrá «actos y eventos para marcar este hito importante que son los cien años del Valencia». «Estoy contento porque en el año del centenario estamos de vuelta a la Champions, porque hemos reorientado el club en el buen camino y tenemos una idea clara y los profesionales para ejecutarla, y porque los aficionados vuelven al campo a apoyar a su equipo», añadía.

Al primer acto del Centenario acudieron varios ex jugadores del club como Vicente Rodríguez, Curro Torres, Miguel Ángel Bossio, Juan Sánchez, Amedeo Carboni o Vicent Guillot, así como varias decenas de jóvenes jugadores que participan estos días en el campus del club. También hizo acto de presencia la vicepresidenta de la Generalitat, Mónica Oltra (que se quedó encantada con la actuación de Bombai), el conseller de Cultura, Educación y Deporte, Vicent Marzà, o la concejala de Deporte Maite Girau.