Curro Torres (41 años) y Rubén Baraja (43 años), compañeros y amigos en aquel Valencia CF Campeón del inicio del nuevo milenio, colgaron las botas para sentarse en un banquillo hace poco más de cinco años. En este tiempo, ya han experimentado las turbulencias de una silla que se mueve más que la del barbero.
Ambos han sido protagonistas este fin de semana de los vaivenes del fútbol. Curro Torres ha firmado con el Córdoba tras la destitución de Sandoval para tratar de salvar al equipo andaluz de la quema, mientras que Baraja dijo su adiós al Sporting convencido de que «los resultados no reflejan el trabajo realizado», afirma.
Curro Torres llega a Córdoba tras su formación en la cantera del Valencia, completando una magnífica temporada en la que el equipo estuvo muy cerca de ascender a Segunda, antes de fichar por el recién ascendido Lorca al que entrenó 19 jornadas. El pasado mes de septiembre, se comprometió con el Istra 1961 de Croacia, club en el que dimitiría en apenas un mes en el cargo.
Baraja comenzó en los banquillos como ayudante de Gregorio Manzano en el Atlético de Madrid. Desde allí llegó a la cantera del Valencia CF, entrenó al Juvenil A (con breve paso por el Mestalla), antes de fichar por el Elche con el que realizó una buena temporada. Sin embargo, no quiso continuar.
En 2016 fue nombrado nuevo entrenador del Rayo Vallecano, tras la destitución de Sandoval, pero fue despedido tras ganar sólo 3 de sus 13 partidos. En diciembre de 2017 fichó como técnico del Real Sporting de Gijón en sustitución de Paco Herrera, hasta que el pasado fin de semana fue destituido.
