El primer ministro portugués, Antonio Costa, se ha sumado a la "buenísima idea política" del presidente español, Pedro Sánchez, de presentar una candidatura conjunta con Marruecos para organizar el Mundial de fútbol de 2030, aunque se ha mostrado cauteloso, frente al "entusiasmo ferviente" de Sánchez.

El presidente Sánchez, que ha planteado oficialmente a Costa esta propuesta en la XXX Cumbre Hispano-Lusa celebrada hoy en Valladolid, ha explicado que ahora queda en manos de las distintas federaciones de fútbol materializar el proyecto.

Sánchez ha desvelado que ya había "comentado oficiosamente hace meses" al mandatario portugués esta idea y ha recordado que esta misma semana se la trasladó en Rabat al Rey de Marruecos, Mohamed IV, que tuvo una respuesta "muy positiva y entusiasta".

El "entusiasmo ferviente" que ha reconocido tener Sánchez con este proyecto, ha contrastado, en la rueda de prensa conjunta que han ofrecido, con la cautela del portugués, que ha advertido de algunos inconvenientes, como que la FIFA modifique sus estatutos y que la idea "no se malinterprete en el continente africano", ya que limita otras oportunidades para que el campeonato se celebre en otros países de África.

La cumbre ha servido también para acordar una "estrategia ibérica contra la despoblación", que sirva para combatir la despoblación y el envejecimiento que padecen diversas regiones transfronterizas, y para emplazarse a concretar la conexión por autovía entre Braganza y Zamora.

Sánchez se ha mostrado partidario de dar un enfoque positivo al problema de la despoblación, al hablar de "repoblar" zonas rurales que han perdido un buen número de habitantes en los últimos tiempos, mientras que Costa ha avanzado la creación de un grupo de trabajo que desarrollará esta estrategia.

El cónclave ha servido para constatar el "excelente" estado de las relaciones bilaterales, según Sánchez, que ha compartido la idea de Costa de que "necesitamos una Europa con más Iberia y una Iberia con más Europa".

En la cumbre de ministros se han firmado un total de siete acuerdos y declaraciones en 22 ámbitos que "tendrán repercusión práctica en la vida de los ciudadanos españoles y portugueses", ha subrayado el presidente español.

Algunos de ellos refuerzan la cooperación en la asistencia mutua de Protección civil en zonas transfronterizas para la lucha contra incendios y otros potencian el intercambio cultural y educativo para fomentar el aprendizaje recíproco del castellano y el portugués.

El anuncio más concreto ha sido realizado por el primer ministro sobre la firma del compromiso de poner fecha al "tan deseado" proyecto de autovía entre Braganza (Portugal) y la provincia de Zamora y León, fundamentalmente para ofrecer al noreste de Portugal una conexión directa con España y Europa; proyecto que lleva años de paralización por la falta de acuerdo y de financiación.

A esta iniciativa se une el compromiso asumido en los últimos días por Costa para completar la conexión por autovía en el paso fronterizo hacia Salamanca, por el municipio de Fuentes de Oñoro, también pendiente durante los últimos años.

Igualmente, ambos mandatarios han anunciado el acuerdo para que Valladolid acoja en 2020 la primera parada de una exposición itinerante con la que España y Portugal pretenden conmemorar de forma conjunta el quinto centenario de la circunavegación protagonizada por Fernando de Magallanes y Juan Sebastián Elcano.

También ha habido acuerdos en materia de interconexiones energéticas de la península con el continente europeo, han suscrito el Pacto Mundial Migratorio y han hecho un llamamiento para su adopción en la Conferencia Intergubernamental que tendrá lugar en Marraquech el 11 y 12 de diciembre.

Según Costa, ha sido una reunión "tan intensa" que ambos países se volverán a encontrar el próximo mes de junio en la ciudad portuguesa de Guarda para la XXXI Cumbre, en la que darán continuidad a lo acordado hoy y lanzarán nuevos asuntos.