El nuevo jugador del FC Barcelona cedido por el Valencia CF, el colombiano Jeison Murillo, expresó ayer «su agradecimiento» al club porque le haya abierto «la puerta más grande del mundo del fútbol», lo que consideró «un sueño de pequeño cumplido».

El defensa central vivió su primer día oficial de azulgrana, que comenzó con el acto protocolario de la firma del contrato que le vincula en calidad de cedido por el Valencia hasta el final de la presente temporada, con una opción de compra, no obligatoria, por parte del club catalán por 25 millones de euros

Lo hizo en el palco President Suñol del Camp Nou acompañado del presidente del FC Barcelona, Josep Maria Bartomeu, y el vicepresidente del club, Jordi Mestre. En el momento de plasmar su firma en el contrato lo hizo acompañado de su hija Celeste, en una simpática imagen.

Murillo reconoció que ganarse la continuidad en el club azulgrana será el reto más grande de su carrera. «Sabemos lo que significa el Barcelona y espero que mi tiempo aquí sea largo. Solo está en mí demostrar que puedo ser parte del club», dijo el jugador.

El colombiano señaló que tener a Leo Messi como compañero de equipo será «un alivio» para él, acostumbrado a sufrirlo cuando lo tuvo como rival. «Es el mejor del mundo y significa mucho para el fútbol», destacó Murillo.

Jeison Murillo desveló que ya ha tenido «una pequeña conversación» con su nuevo técnico, Ernesto Valverde, del que dijo que tiene «confianza» en él y ahora le toca a el mismo «demostrarle al equipo porque fui elegido para vestir esta camiseta».

El ex del Valencia llega un año después de que lo hiciera su «amigo» Yerry Mina, ahora en el Everton. Murillo evitó compararse con Mina, aunque desveló que su compatriota le «recomendó y aconsejó cosas» sobre su nuevo club.

Murillo dijo que a pesar de no contar para Marcelino, «siempre continué trabajando para que cuando llegaran cosas grandes las pudiera aprovechar» Considera el jugador este fichaje por el Barcelona como un plus «muy grande» para volver a la selección colombiana.