El Mestalla sumó ayer una victoria agónica que le permite depender de sí mismo para conseguir la permanencia en la última jornada. El conjunto de Chema Sanz encara la última jornada en el estadio Antonio Puchades frente al Espanyol B con mayor optimismo. El filial valencianista viajaba a Villarreal con ese único objetivo ante un filial groguet ya clasificado para la promoción de ascenso a Segunda A. Y lo hizo de forma perfecta.
Ambos equipos contaron con ocasiones claras para adelantarse en el marcador. Sekou y Sebas Moyano casi adelantan al Mestalla en el primer acto con tres ocasiones claras dentro del área. Pero el meta Cristian Rivero también tuvo que realizar una intervención de mucho mérito a lanzamiento de Dani Villa.
La necesidad de ganar del Mestalla se tradujo en una tensión que, a la postre, se convertiría en liberación. No sin antes venir acompañada de sufrimiento con un tanto anulado al Villarreal B.
A cuatro minutos del final, Sito asistió a Lolo Plá para que el delantero hiciera el 0-1. Locura máxima en el equipo y en el banquillo que celebraban aliviados el tanto que podía significar la permanencia en la categoría. El Mestalla estuvo durante gran parte de la temporada en zona de descenso.
