castellón/barcelona B

castellón. Álvaro Campos, Muguruza, Regalón (Jairo Cárcaba, min. 73), Carlos Delgado, Satrústegui, Marc Castells, Rafa Gálvez, Óscar (Pablo Roig, min. 56), Jamelli, César Díaz y Cubillas. Barcelona b. Carevic, Guillem, Mingueza, Cuenca, Vilarrasa, Oriol Busquets, Merveil (Chumi, min. 45), Morer, Novaes (Marqués, min. 78), Collado y Kike Saverio (Nico, min. 90). Goles. 1-0, min. 84: Jairo Cárcaba. 1-1, min. 86: Marqués. 2-1, min. 93: César Díaz. a ÁRBITRO: Santos Pargaña, del comité andaluz, asistido por García Ramos y Naranjo Marín. Amonestó a los locales Óscar y Rafa Gálvez, y a los visitantes Novaes, Cuenca y Collado.e Estadio: Castalia, unos trece mil espectadores.

Se salvó el Castellón a su manera, al final, en un escorzo agónico y feliz que dejó huella en el estadio Castalia. Sufriendo hasta el último suspiro, el Inmortal se tuvo que salvar un montón de veces. Primero sobreviviendo entre penurias durante un curso de lo más errático, para al menos llegar vivo a la última jornada. Después levantándose de un capazo de fallos inverosímiles en la primera parte, ahí también se tuvo que salvar el Club Deportivo. Luego cuando el Barcelona B se adueñó de la pelota y el partido, en el arranque de la segunda parte, ahí también evitó la muerte el equipo de Óscar Cano. Se tuvo que salvar tantas veces que cada esfuerzo dolía y crujía: en el minuto 84, con el gol tractoresco de Jairo, el chico de los goles milagrosos, ahí con el 1-0 pensó el Castellón que ya estaba salvado, pero no, aún tuvo que salvarse otra vez, cómo no, reventando el ataúd a puñetazos. Porque empató entonces el Barcelona B, en el minuto 87 con un remate cirujano de Marqués, y el Castellón llegó al descuento necesitando un doble milagro: marcar un gol y esperar otro en un campo ajeno. Lo tenía que hacer y lo hizo. El Castellón se salvó por antepenúltima vez con el 2-1 de César Díaz, que tensó a la red una falta en la frontal del área; el Castellón se salvó por penúltima vez cuando al Conquense se le ocurrió empatar en el campo del Alcoyano, de rebote, y el Castellón se salvó por última vez con toda la tropa sobre el césped, con la tensión desbordando la bañera de Castalia, esperando los finales en otros campos, en máximo suspense.