El Valencia Basket está de enhorabuena, y no solo por la victoria ante Montakit Fuenlabrada. Más allá de volver a saborear el triunfo en cancha ajena, los taronja recuperan a uno de los efectivos con mayor arraigo en el club, Sam Van Rossom. El base volvió a entrenar con el grupo tras ser intervenido en su rodilla izquierda hace veinticinco días. Las molestias en la misma articulación que le llevó dos veces a pasar por el quirófano hicieron saltar la alarma en los servicios médicos del club. Finalmente, la lesión no resultó ser de la gravedad de las anteriores. Con esta recuperación, el '9' se convierte de nuevo en una opción más para Jaume Ponsarnau de cara a un calendario saturado de partidos importantes el próximo mes. Aunque la vuelta a las pistas de Van Rossom no será tan rápida.

A pesar de que el belga practicó con sus compañeros, no terminó la sesión. Fue la primera toma de contacto para recuperar sensaciones, pero eso no quiere decir que esté al 100% para competir. Habrá que esperar para ver al '9' en plena acción, más si cabe teniendo en cuenta su historial de lesiones. No obstante, el base empieza a coger ritmo y las primeras impresiones fueron positivas según transmitió el club.

Cuando el pasado 13 de noviembre fue intervenido en Amberes por el doctor Declercq -médico de su confianza que también operó al belga en la misma rodilla en junio de 2017-, la vuelta de Van Rossom estaba planificada para antes de Navidad. El plazo estimado de recuperación de su rodilla fue de aproximadamente cuatro semanas, un tiempo que de momento el director de orquesta taronja está cumpliendo. De hecho, el internacional belga volvió a ejercitarse en el gimnasio a los siete días de su intervención.

Más de un mes de baja

Si bien, Sam Van Rossom fue operado hace veinticinco días, la inactividad del de Gante procede del pasado 26 de octubre. Los últimos minutos de 'Sammy' fueron en el Coliseum Burgos. Pesa a la victoria final ante el San Pablo burgalés -única en pabellón visitante este curso antes de la victoria del pasado sábado en Fuenlabrada-, el castigo taronja se tornó en Van Rossom. Las molestias en su rodilla aparecieron en un encuentro donde no pudo disputar el segundo tiempo.