El Real Madrid confirmó su clasificación para los octavos de final de la Copa del Rey tras deshacerse este miércoles del Unionistas de Salamanca (1-3) en un partido discreto del conjunto merengue que resolvieron los goles de Gareth Bale y Brahim Díaz tras el susto de los locales, que llegaron a igualar la eliminatoria durante cinco minutos.

Desde el 57 hasta el 62, las Pistas de Salamanca vibraron como no lo habían hecho en las dos últimas décadas. La visita de la galaxia blanca se convirtió en locura con el golazo de Álvaro Romero. Un zurdazo desde el corazón del área que se coló por toda la escuadra de Areola. El miedo fue presente para los de Zidane, sobre todo por el aviso previo al Barça.

El Real Madrid salió advertido al césped salmantino, pero pronto se quitó de en medio cualquier atisbo de ansiedad. El responsable fue Bale, que logró el 0-1 antes de alcanzar el ecuador de la primera mitad. El galés conectó con la pierna derecha un centro de James y su remate se introdujo por el palo del portero.

El gol, que no lo celebró el 'expreso de Cardiff', sirvió para apaciguar los ánimos del Unionistas y también los de toda la ruidosa grada local. De hecho, ese lanzamiento de Bale dio más dominio en los metros finales y Benzema perdonó el segundo tras un disparo que pegó en el lateral de la red.

Pasaba la media hora de partido y James, con una acción de muchos quilates, puso el cuero en el larguero, pero no hubo manera de ampliar la cuenta. Sin alharacas, pero con posesión y autoridad, los de Zidane desperdiciaron hasta tres buenas ocasiones para no dar vida a su rival en el segundo asalto. Y eso fue lo que pasó tras dos oportunidades enviadas al limbo. Para colmo, Bale ya no estaba en el campo aquejado de otra lesión muscular.

La primera de ellas fue de James, que se topó con Brais a los 49 minutos en un remate muy claro. Fue entonces cuando el equipo de Jabi Luaces encontró al genio de la lámpara en una acción que jamás olvidará el pueblo salmantino. Romero cogió el balón en tres cuartos de campo, caracoleó delante de Militao y encontró el hueco para superar a Areola.

El gol espoleó a Unionistas, pero el Madrid no sucumbió a sus encantos. Los de Zidane se apoyaron en la verticalidad de Vinicius y las subidas de Carvajal para recuperar el mordiente que habían perdido hasta entonces y apenas cinco minutos después pudieron encontrar el tanto de la tranquilidad.

Brahim aprovecha la oportunidad

Marcelo centró al área y Brahim, recién entrado, remató de mala manera, pero Góngora la introdujo en su portería en el intento de despejar el balón. A partir de ahí, el Unionistas se deshizo para llegar al área blanca, pero fue nuevamente Brahim quien besó las redes. En esta ocasión en una jugada personal por el costado diestro.

El malagueño soltó un latigazo con la pierna derecha y cerró un partido que será histórico para un club de tan solo seis años de vida. La noche de este 22 de enero será siempre recordada porque -durante cinco minutos- tuvieron contra las cuerdas al 13 veces campeón de Europa. Bendito nuevo formato, bendita Copa del Rey.

Ficha técnica

--Resultado: Unionistas de Salamanca 1- 3 Real Madrid (0-1, al descanso).

Unionistas: Brais; Gallego, Zubiri, Ayoze (Amouzou, min.86), Góngora, Piojo; Javi Navas (Diego González, min.80), Guille Andrés, De la Nava, José Ángel; y Garrido (Romero, min.55).

Real Madrid: Areola; Carvajal, Militao, Nacho, Marcelo; Casemiro, Valverde, James (Isco, min.80); Vinicius, Bale (Brahim, min.53) y Benzema (Jovic, min.75).

Goles:

0 - 1, min.18, Bale.

1 - 1, min.57, Romero.

1 - 2, min.62, Góngora, en propia meta.

1 - 3, min.92, Brahim.

Árbitro: Melero López (C.Andaluz). Amonestó con tarjeta amarilla a Romero (min.67) en el Unionistas.

Estadio: Las Pistas. 4.000 espectadores. Lleno.