El presidente del Valencia CF, Anil Murthy, ningunea al entrenador del equipo, Albert Celades, en una entrevista concedida a la revista online de pago The Athletic, en la que se pone una nota de «8 sobre 10» como dirigente del club de Mestalla. Murthy deja claro, por si alguien lo dudaba, que quiere «entrenadores que ejecuten las directrices de Lim como un funcionario», en referencia al concepto que tiene del inquilino del banquillo del Valencia CF tras la destitución de Marcelino. «Puede ganar la Champions, pero si no sigue las pautas de Meriton será despedido», añade en la entrevista traducida por el periodista Paco Polit, en la que asume que Lim no está contento con la forma de comunicar sus iniciativas para el club y que a la gente «no le importa si les representamos, lo que quieren es vernos ganar».

? Salida de Marcelino. «Entiendo que la gente pensara que las cosas marchaban bien, pero desde junio hubo problemas porque el entrenador y el director general empezaron a discrepar de la idea del club que nosotros queríamos. Les dejamos marchar y la gente nos trató de locos, tras la derrota frente al Barcelona el ambiente era extremadamente hostil, especialmente contra mí. Nos decían que estábamos destrozando el club, pero Lim tiene que mirar y defender a la entidad más allá del corto plazo».

? Entrenador modelo. «Queremos un técnico que apueste por la cantera y que se atreva a ponerlos sobre el terreno de juego. Queremos que ese entrenador diga: 'yo no soy más que un funcionario, no soy la estrella aquí, los jugadores sí y voy a apostar por ellos, porque si estoy en el Valencia es para ejecutar las instrucciones del propietario como un funcionario'. Además, también entendemos que el entrenador quiera recomendar buenas inversiones, pero que estas no sean para ganar el lunes, sino para que Lim tenga un modelo sostenible de inversión y ventas durante los años posteriores».

?Discrepancias del técnico. «El entrenador que no siga nuestras pautas ya sabe donde tiene la puerta. Hay mil entrenadores esperando para entrenar al Valencia, te lo garantizo. Si sigues las instrucciones de Lim puedes quedarte aquí para siempre, pero si empiezas a divergir de la política del club, ya puedes ganar la Champions League, que al día siguiente serás despedido».

? Rigidez. «Ya lo decimos claramente: nosotros gestionamos el club, el propietario sabe lo que quiere. Tenemos que tener la valentía de decírselo a cualquiera, no importa que obtenga buenos resultados o no popular que sea en la ciudad. Si un futbolista critica públicamente al club o al propietario sermos claros y se lo diremos».

? Críticas de los jugadores. «Sí, es cierto que defenfieron a Marcelino, pero nosotros tenemos que tener las agallas para dejarles claro que alguien ha puesto más de 200 millones de libras para comprar el club y las ideas que está teniendo demuestra que está creciendo bien. Con el tiempo vamos a llegar a un 10 sobre 10».

? Valoración personal. « Me pongo un ocho. No por los resultados, sino por la valentía que he tenido para seguir en la dirección que habíamos decidido».

? Aspectos a mejorar. «El Sr Lim siempre nos dice que no está satisfecho con la manera en la que comunicamos sus ideas para el club. Hemos mejorado nuestra área digital y estamos creando vínculos con empresas locales».

? Críticas a la afición. «Hay gente en Valencia que no supera que perdieran su club ante un inversor extranjero. La única forma que tenemos de lidiar con eso es librarnos de toda la gente violenta que podamos identificar... No pararé hasta que estén todos fuera»

? Críticas ultras. «Años atrás hubo veces en las que al volver tras una derrota algunos aficionados, que se llaman así pero no lo son, tiraban piedras contra el autobús. No todos los ultras son delincuentes, pero los que hacen esas cosas sí que lo son. Nos hemos librado de ellos porque son una minoría por mucho ruido que hagan. Esa época fue complicada, Gary Neville lo tuvo muy difícil porque fue una etapa de turbulencias, a veces cuando le veo se lo comento y él se lo toma con buen humor».

? Apoyo aficionados. «Soy una cara india que viene de Singapur como presidente y nunca he estado viculado a la sociedad valnciana. Mucha gente no me ve como legítimo representante del club. Hablo de un grupo muy pequeño de personas, algunos periodistas locales, algunas personas que solían mandar aquí. Sin embargo, cuando voy por la calle la gente está de nuestro lado, ya no hay problemas financieros, hemos jugado la Champions tres veces, hay buenos jugadores. La gente quiere que ganemos, no se preocupan de si les representamos o no. Esa gente que hace ruido son un 1%».