Maxi Gómez estará un mes como mínimo apartado de los terrenos de juego. El delantero del Valencia sufre una fractura en el quinto metatarsiano de su pie izquierdo y el martes pasará por quirófano para ser intervenido. Un mazazo para Albert Celades, para un equipo que asiste perplejo a la plaga de lesiones de este año y sobre todo para un futbolista que tenía muchas esperanzas depositadas en este tramo final de la temporada. Maxi está roto y el vestuario también. Perder por lesión a otro compañero el mismo día que se reencontraban con la victoria y miraban al futuro con más optimismo duele y mucho. Maxi es otro golpe más a la colección de contratiempos de la temporada.

El uruguayo sufrió un pisotón en los últimos compases de la primera parte contra el Betis y tuvo que ser sustituido por Gonçalo Guedes en el descanso. Las sensaciones fueron malas desde el primer momento. Maxi cojeaba sobre el césped y apenas podía correr. Sus primeros gestos llevándose la mano a la cara y tocándose con preocupación su bota izquierda presagiaban una lesión de gravedad. El futbolista se marchó del estadio ayudado por muletas y con dolor. Las pruebas médicas a las que se sometió el domingo por la mañana confirmaron los peores pronósticos. No solo había un traumatismo fuerte. La base del dedo pequeño del pie izquierdo de Maxi estaba fracturado.

«El jugador Maxi Gómez presenta una fractura en el quinto metatarsiano de su pie izquierdo, que se produjo en el transcurso del partido de LaLiga de este sábado en Mestalla ante el Real Betis», señalaba el parte médico oficial del club. El tiempo estimado de recuperación es de alrededor de un mes como mínimo. En el club, eso sí, se contempla el escenario de que pueda llegar a los dos meses de lesión. Dependerá de lo que se observe en la intervención quirúrgica y sobre todo de su proceso de recuperación. Las lesiones en el quinto metatarsiano suelen ser muy delicadas y requieren extremar la prudencia. Querer adelantar plazos suele ser sinónimo de peligrosas recaídas

Dolido por la Champions

El delantero se encuentra en su domicilio con tratamiento médico a la espera de ser intervenido el martes. El dolor es físico, pero también mental. El domingo ni siquiera realizó declaraciones a través de sus perfiles en redes sociales. Su último mensaje se produjo pocas horas después de acabar el partido el sábado. «Tres puntos importantísimos. Toca recuperarse para darlo todo en el próximo partido. Gracias afición por el apoyo de siempre. Amunt Valencia!», escribía. El diagnóstico suspuso un duro golpe para el jugador. Maxi estaba dolido entre otras cosas porque se perderá la vuelta de los octavos de final de la Champions contra la Atalanta del 10 de marzo en la que tenía muchas esperanzas depositadas. Se quedó con la espina clavada de sus ocasiones desperdiciadas en San Siro y tenía más ganas de remontada que nadie. Lo tendrá que ver desde el palco de autoridades de Mestalla. Además del partido del viernes contra el Alavés y contra los italianos, Maxi es baja segura contra el Levante, Real Madrid y Osasuna a principios de abril. Desde entonces hasta el final del campeonato liguero solo quedarán ocho partidos. Maxi se perderá más o menos en función de su evolución. El jugador ahora mismo desconoce cuál será su fecha de vuelta al césped, pero sí tiene claro que estará a disposición del entrenador para ayudar al equipo durante las últimas jornadas.

Precedentes Negredo y Vezo

El último precedente de una fractura de un quinto metatarsiano en el Valencia fue Rubén Vezo. El portugués, ahora jugador del Levante, necesitó dos meses para reaparecer en la temporada 17/18. Años antes sufrió esa lesión Álvaro Negredo. El vallecano se rompió con el Manchester City el 21 de julio de 2014 y no debutó oficialmente hasta el 25 de octubre. Tres meses después.

La lesión tuvo un impacto importante en su país natal. Uruguay amaneció con la noticia de que Maxi se perderá los dos partidos de la fase de clasificación para el Mundial de Catar de 2020 en las que la celeste se enfrentará a Chile y Ecuador el 26 y 31 de marzo. Para su selección es una baja sensible porque se une a la de Luis Suárez, operado por la rodilla derecha y con dos meses de recuperación por delante.

38 lesiones

El Valencia está viviendo un auténtico calvario de lesiones esta temporada. Al equipo le ha mirado un tuerto. Solo así se explica la baja de lesiones musculares, en rodillas, tobillos, pies, caderas, espaldas y hasta enfermedades como la varicela de Alessandro Florenzi o los vómitos de Jasper Cillessen.