Los cerca de mil deportistas de élite que hay en España recibieron ayer el primer mensaje por parte del Gobierno, que pone en marcha un servicio de asesoramiento psicológico ante la crisis de la pandemia. Una atención personalizada, para quien la solicite, que el Consejo Superior de Deportes pone a disposición de un colectivo muy afectado por la situación. Sin entrenamientos, competiciones o patrocinadores, los deportistas de élite se han visto, de repente, ante el abismo. pero piden soluciones más tangibles. Medidas por parte de aquellos cargos políticos que viven del Deporte gracias a ellos para no convertirse, de repente, en ciudadanos de tercera. «Todo es silencio e incertidumbre. En el resto de profesiones se van a aplicar ERTES, prórrogas fiscales, otras prestaciones por desempleo? pero nosotros no estamos ni en el sector público ni en el privado. Somos humo, estamos totalmente desprotegidos», explica Eduardo Blasco, 34 veces campeón de España de Salvamento y socorrismo y miembro de la selección española de natación. Lo que pide es el auxilio de los cargos políticos deportivos de las administraciones, más allá del CSD.

«Un demagogo me diría que las administraciones cosas más importantes ahora, y por supuesto que las tiene. Pero ¿y los que cobran por esto? ¿Han pensado las autonomías o los ayuntamientos qué van hacer con los deportistas de élite? No tenemos ninguna medida para acogernos¿Acaso va a dejar de cobrar un conseller de Deportes? ¿Qué están haciendo los concejales de Deportes que cobran 3.000 euros? Ellos son los que cobran por pensar», asegura el campeón afincado en Elche. «Nosotros somos nichos de mercado para que exista un concejal, un técnico, un asesor, personal... Estamos pidiendo que nos llamen. No puede ser que estén siempre para salir en la foto y cuándo nos hacen falta de verdad desaparezcan mientras siguen cobrando», añade.

La denuncia de Eduardo Blasco tiene el apoyo de un buen número deportistas, pero es él quién ha decidido dar la cara. «Igual el BOE dice que somos un orgullo para España, pues que lo demuestren ahora. Merecemos un respeto. El 90% de los deportistas de élite no son millonarios. A mí me parece bien que Rafa Nadal pida que te quedes en casa, pero con unos cuantos millones en la cuenta, es fácil», explica.

«No sé, una llamada de teléfono, la mínima preocupación por parte de un conseller o concejal sería lo mínimo. Lo único que pedimos es que se pongan a ello los que cobran por esto. Hay trabajos esenciales que van a sostener la economía, pero nosotros no somos menos que el fontanero, el agente comercial o el obrero. Si somos un país, lo somos para todo. No podemos pasar de ser héroes a ser invisibles. Nos merecemos, como mínimo, una llamada de los responsables de Deportes», apostilla.