El exfutbolista del Valencia CF, del Barcelona y exdirector deportivo del club catalán, Robert Fernández, llegó a estar cerca de fichar por el club de Mestalla como máximo responsable deportivo tras la salida de Mateu Alemany, el pasado mes de noviembre. «El Valencia CF se sentó conmigo. Tampoco hablamos de cosas muy concretas, sino más a nivel general. Fue un acercamiento pero de ahí no pasó. Yo creo que no tenían claro en ese momento lo que querían hacer», afirmó ayer el exjugador de Betxí, de 57 años, en una entrevista, ayer, en la web de Superdeporte con Carlos Bosch.

Robert cree que el Valencia CF no se ha equivocado con César para el puesto. Todo lo contrario. «Creo que han acertado con César, un tipo joven y con ilusión. Tiene feeling con el entrenador. Fue la decisión más acertada», explicó ayer.

Si Peter Lim, en aquella reunión en noviembre en Barcelona, hubiese decidido ya fichar a Robert. ¿Qué hubiese contestado? «Si hubiera ido para adelante, hubiese dicho que sí. ¿Cómo voy a decir no al Valencia CF si he sido jugador 10 años y he trabajado 3 años en el club? Es un club al que siempre he estado vinculado. Mi vida, mi familia, está en València», aseguró el excentrocampista, uno de los mejores rematadores de cabeza que ha pasado por la Liga. . «Pero al final es muy complicado que se den las circustancias para estos fichajes. Recuerdo cuando surgió el fichaje por el Barcelona. Llevaba años ya trabajando para una empresa de representación de futbolistas y me llamaron. Y ocurrió. Pero el fútbol es tan cambiante...».

Robert Fernández era el director deportivo del FC Barcelona cuando el club blaugrana fichó a Paco Alcácer, por 30 millones de euros, en 2016. «Teníamos a Luis Suárez y estábamos valorando a 6 o 7 jugadores para traer otro delantero. Al final, Luis Enrique -entonces entrenador del Barça- y yo concretamos que teníamos que fichar a un jugador con un perfil muy concreto, joven, que conociese la competicón pero que viniese a crecer y que su desembarco en el vestuario no crease problemas. Queríamos a un delantero que jugase en espacios cortos y que fuese un buen rematador y Alcácer era lo mejor. También que cuando saliese al campo estuviese siempre conectado, algo que sólo hacen los grandes jugadores», recordó.

«Llegué a hablar con otro delantero, por el que había que pagar mucho más, pero cuando le pregunté cómo llevaría si estuviese 4 o 5 partidos en el banquillo me dijo que 'mal'. Me tuve que levantar. Alcácer es muy buen tipo y sabía muy bien llevar ese rol. Era justo lo que necesitaba el Barça en ese momento», explicó. «Paco, arreglo a los minutos jugados, marcó muchos goles en el Barcelona. A nivel minutos-goles está entre los 4 mejores delanteros de Europa», añadió.

Robert cree que el Valencia CF debe de aprovechar la figura del intermediario Joge Mendes, principal apoyo de Peter Lim en los fichajes. «Tiene muchos contactos y eso hay que aprovecharlo, le puede venir al club. Hoy en día tener muy contactos es bueno», dijo.

Robert fue en 1990 el fichaje más caro de la historia del Valencia CF, hasta entonces, a cambio de 300 millones de pesetas (1,8 millones de euros). Cuatro años antes, tras el descenso del Valencia CF a Segunda, había fichado por el Barça a un club, el de Mestalla, en una extrema situación económica. «¿Qué era mestalla los sábados por la noche cuando venían el Real Madrid o el Barcelona? La canción aquella en Mestalla de 'Hola, Fondo Norte. Hola, Fondo Sur', ponía la piel de gallina a los futbolistas. Como el campo del Valencia CF no hay otro, ni san Mamés. Cuando va, va», recordó.

«Yo si no hubiese sido futbolista, hubiese sido ciclista. Mi padre había sido ciclista amateur y la guerra civil lo truncó totalmente, porque él tenía la ilusión de ser profesional. Quería que un hijo fuese ciclista, o mi hermano o yo. Mi hermano Pedro jugó en el Valencia CF con 17 años, pero le conocían por el segundo apellido, Bonillo. A mí me compró mi padre una bicicleta rojita y salía por el pueblo. Pero mi hermano, que era más contundente, me dijo que en el ciclismo no iba a ganar dinero e iba a sufrir mucho. Acertó de pleno», rememoró Robert. «Yo empecé a jugar en el Villarreal a los 12 años. Antes de firmar por el Castellón estuve a punto a fichar por el Betis, con 16 años», recordó Robert, que dejó una huella muy profunda en las gradas de Mestalla.