El Valencia Basket no negocia las cláusulas de sus jugadores y eso lo saben en España y en toda Europa. Alberto Abalde ha sido el último que ha tenido que pasar por caja para depositar los 1,5 millones de su cláusula de rescisión para fichar por el Real Madrid, pero antes lo hicieron otros muchos que dejaron importantes ingresos para el club.

Jugadores como Dimos Dikoudis o Federico Kammerichs fueron de los primeros en pagar elevadas cláusulas de rescisión en 2004 y 2005, con sus fichajes por el CSKA Moscú y Akasvayu Girona respectivamente. 500.000 euros se ingresaron por el primero y 400.000 por el argentino.

Pero no fue hasta 2011 cuando se superó la barrera del millón de euros con al salida de Dusko Savanovic tras una espectacular temporada de taronja. El serbio, que se fue el Efes Pilsen turco, dejó 1,5 millones de euros en caja.

Una cantidad que igualó Víctor Claver con su salida con destino al FC Barcelona en 2016, aunque en el caso del de Maristas, éste ya no pertenecía a la disciplina taronja y los ingresos fueron por renunciar a los derechos del club por el jugador en su regreso a España.

El mencionado Abalde ha igualado a ambos, pero antes del gallego, el club también ingresó un millón de euros por la cláusula de Pierre Oriola en 2017, justo después de hacer historia con el Valencia Basket ganando la única Liga Endesa en las vitrinas del club taronja.

El 'top 5' de ingresos lo cierra Vitor Faverani, quien dejó en el club 750.000 dólares por su salida hacia la NBA con destino a los Boston Celtics en 2013.

Matt Thomas, Pau Ribas o Justin Doellman fueron otros de los jugadores de la historia reciente que abonaron su cláusula para dejar el club, aunque ninguno de ellos se acercó ya a las cifras de un 'Top 5' que dejó más de 6 millones de euros.El club, eso sí, ha mantenido siempre la filosofía de no variar sus presupuestos previstos a pesar de estos ingresos, que han servido para reducir las aportaciones económicas que hacen al final de cada temporada los mecenas Juan Roig y Hortensia Herrero para cuadrar el presupuesto.