El Valencia CF asume que la salida del capitán va a ser una carrera de fondo en la que no tiene las mejores armas para ganar. El club ha puesto a Dani Parejo en el mercado y el jugador está en ese sentido señalado, es público y notorio, un hecho que salvo sorpresa va a condicionar mucho las opciones de mercado que lleguen por el centrocampista. La más clara a día de hoy sigue siendo la del Villarreal. Unai Emery, tal como adelantaba SUPER días atrás, quiere al futbolista y está dispuesto a esperar lo que haga falta para llevárselo con el mínimo coste posible. Tiene una ficha alta y dos años más de contrato, eso no lo van a poder cambiar, así que la estrategia está centrada en minimizar el coste del traspaso o, si se diera el caso, eliminarlo.

El club de La Cerámica, que se ha interesado tanto por Parejo como por Francis Coquelin, conoce la urgencia que tiene el Valencia por sacar de la plantilla a los futbolistas con los que ha decidido no contar, así como también los que tienen un peso más importante en el Fair Play Financiero. Además de borrar los vestigios de la era Marcelino, ha de recudir de manera drástica el coste de su plantilla. Necesita desprenderse lo antes posible de dos o tres futbolistas aparte de Ferran Torres, ya vendido, aunque la cosa va para largo.

Así, a pocos días ya del regreso del equipo tras las vacaciones, no ha salido ninguno de los jugadores que el club declaró transferibles. ¿Un problema para Javi Gracia? La realidad es que el Valencia CF tiene que hacer la primera citación para el próximo lunes y martes, días en que se llevarán a cabo las habituales pruebas antes de comenzar la pretemporada. En principio, no hay intención de prolongar las vacaciones de ninguna de ellos excepto en el caso de que haya en ese momento alguna negociación de salida muy avanzada. El nuevo entrenador, por tanto, arrancará con todos a la espera de acontecimientos.