El Valencia CF ha liquidado al último superviviente de la era Marcelino. Ayer se consumó el despido iniciado hace un año del readaptador Alberto Torres. Una polémica salida que frenaron los jugadores hace diez meses gracias a la intervención, por ejemplo, de Dani Parejo. Casi un año después, como sucedió con Paco Camarasa, la propiedad ejecuta su despido a pesar de ser uno de los profesionales de confianza de la plantilla. Sucedió a principios de octubre. El recién nombrado jefe de los servicios médicos Pedro López Mateu, bajo las directrices de Meriton y el beneplácito de Anil Murthy, despidió al recuperador de confianza de los jugadores alegando que Albert Celades no estaba contento con él. La información llegó a oídos de los capitanes. José Luis Gayà se puso en contacto con Parejo y el de Coslada telefonéo a Celades para comprobar si era cierto. El catalán, muy enfadado, se levantó a mitad de un comida familiar y se fue a Paterna para encararse con el médico. Además, el Valencia busca acomodo para el fisioterapeuta Zurdi.