Mejorar la dirección del juego taronja era uno de los objetivos prioritarios que se había marcado el cuerpo técnico del Valencia Basket de cara a la temporada 2020-2021. Contar con varios jugadores que puedan rotar durante el partido sin que se resienta la intensidad y ritmo del juego es vital para Jaume Ponsarnau, que un año más estará al frente del banquillo taronja.

Finalmente, el Valencia Basket iniciará la pretemporada la próxima semana con cuatro bases, cuatro directores de juego, aunque los minutos se repartirán básicamente entre tres de ellos: Sam Van Rossom, Martin Hermannsson y Guillem Vives. El cuarto en discordia, Quino Colom, no lo tendrá fácil para disponer de oportunidades y minutos.

El objetivo del club era buscar acomodo a Colom en otro equipo pero de momento, nada ha fructificado y el base catalán cumplirá el año de contrato que le queda con el Valencia Basket. Esta misma semana se cerraba una nueva puerta para el base del Valencia Basket. El Panathinaikos griego, que había mostrado su interés Colom, cerraba finamente hace unos días el fichaje del base estadounidense Pierre Jackson procedente de la G-League, la competición filial de la NBA y que ahora, regresará a Europa y a la Euroliga con el conjunto griego. Por tanto, el fichaje de Jackson deja a Colom sin otra de sus opciones.

Jaume Ponsarnau no ha ocultado en las últimas semanas que Quino Colom no entra en sus esquemas y que su papel en el equipo será residual. Con la renovación de Sam Van Rossom, que cumplirá su octava temporada en el Valencia Basket y el fichaje de un base de garantías como es el islandés Martin Hermannson, la posición de base parece muy bien cubierta. A Vam Rossom y Hermannsson se une otro base que cuenta con la confianza de Ponsarnau como es Guillem Vives que también renovaba este verano con el Valencia Basket.

Vam Rossom, una de las piezas claves el Valencia Basket los últimos años ha demostrado sobradamente su calidad y tiene la total confianza de Ponsarnau. Si las lesiones no le frenan, será uno de los hombres clave del equipo una temporada más. Su veteranía y su experiencia (tiene 34 años) son una garantía. A su lado tendrá a Martin Hermannsson, de 25 años y procedente del Alba Berlín. Un jugador con talento y hambre de hacer grandes cosas en la Euroliga y la Liga Endesa. Hermannsson, que llegaba esta semana a València y que ayer mismo pasaba las pruebas médicas destacaba que en la últimas semanas ha podido hablar con Vam Rossom y que el entendimiento con el belga es total.

Guillem Vives, por su parte, afronta con mucha ilusión la nueva temporada tras el varapalo de perderse la Fase Final se la Liga Endesa en València causa de una fractura de dedo. Vives, que no disputa un partido desde el 5 de marzo, será un recambio de calidad para Van Rossom y Hermannsson.