Estreno triunfante el que cosechó este sábado el Levante UD Femenino en su primer compromiso dentro de la Liga Iberdrola 2020-21 -que también fue el primero del campeonato- al imponerse por 1-2 sobre el Escuelas de Fútbol (EDF) Logroño. El encuentro, que contó con una buena remontada de las granotas, también fue el primero con público en las principales ligas profesionales españolas, lo que permitió que casi quinientos aficionados pudieran ver como las levantinas resolvían el encuentro en cinco minutos del segundo tiempo.

Así, el choque estuvo marcado, al principio, por la «emotividad» de volver a un choque oficial siete meses y, además, hacerlo con aficionados en las gradas, prácticamente los más fieles del EDF, que fueron los que se acercaron a Las Gaunas en un horario tan poco habitual como un sábado a las 11.30 de la mañana.

En esta línea, como prevención ante la covid-19, todo ellos se habían separado en filas alternantes y, además, cada espectador debía estar rodeado por dos asientos sin ocupantes. A esto se sumó la toma de la temperatura a la entrada del estadio, donde los aficionados debían lavarse las manos con gel.

Las medidas de protección darían paso a un inicio de encuentro con mucho respeto entre los dos equipos y poco ritmo, aunque poco a poco fue el conjunto riojano el que trató de estirarse, con algunas acciones de ambición, eso sí, del Levante que mediante un remate de Alba Redondo a punto estuvo de anotar el primer tanto del encuentro. Sería solo el primer aviso destacado de las de María Pry, que volverían a perdonar por medio de Irene Guerrero y de Esther, en dos ocasiones, que gracias a la actuación de la portera local, Paloma Tajonar, se quedaban sin premio.

Sin embargo, antes del descanso, y pese al dominio de las levantinistas, sería el EDF Logroño el que aprovecharía una veloz transición para adelantar a las locales por medio de un potente lanzamiento de Olga García que golpeó en Rocío, introduciéndolo en propia meta. Era un 1-0 que ponía por detrás a las granotas, que debían remontar en el segundo tiempo si deseabgan lograr un resultado positivo. Y lo hicieron. Tras el paso por vestuarios el juego desplegado por las valencianas mejoró notablemente y las levantinistas lograron ahogar a al equipo logroñés en su propio campo.

Fruto de ello, primero Irene Guerrero con un buen testarazo y cuatro minutos después Esther con un zurdazo inapelable daban la vuelta al resultado. De ahí hasta el final sería un dominio del Levante donde solo la mala suerte evitó que acabara de forma más abultada el resultado. Victoria, tres puntos e inicio con buenas sensaciones para el conjunto granota.