José Luis Morales ha sido una de las sensaciones en clave granota este arranque de temporada. Es cierto que las cosas a nivel colectivo no han salido de la mejor forma y que la situación del equipo en la clasificación asusta, pero El Comandante es una de las notas positivas de este inicio de curso. No es exclusivamente cosa del acierto a portería–que también–, son sus apariciones cuando el cuadro granota más lo ha necesitado, su incidencia en el juego, su compromiso y también sus cuatro goles que han servido para que el equipo sume en partidos importantes. No valieron los primeros dos en Mestalla, pero en el de Pamplona certificó el único triunfo de la temporada hasta la fecha y ante el Alavés igualó el partido cuando más fea pintaba la cosa.

A sus 33 años, Morales todavía tiene mucho que decir como levantinista. El atacante ha iniciado la temporada como un tiro y ya supera las dianas que marcó el año pasado. De hecho, en la 19/20 completó su segunda temporada más mala a nivel goleador (4) como jugador del Levante UD; solo fue peor en la 14/15, su primer año en el primer equipo de Orriols tras su cesión en Eibar (3).

Este curso ya van cuatro goles trancurridas las primeras 9 jornadas, justos los mismos que llevaba a estas alturas en la 17/18, la mejor campaña de su vida. Pero a diferencia de aquel año, el Levante ha llegado a la jornada 9 con un partido menos (aplazado ante el Atlético), por lo que Morales ha firmado su mejor arranque goleador.

Dicho de otra forma, El Comandante nunca había marcado 4 goles en sus primeros 8 partidos ligueros como profesional. Se acercó hace dos temporadas, cuando necesitó un partido más para llegar a la cifra, y por entonces terminó LaLiga con 12 dianas y el levantinismo pedía su llamada para la selección.

Compromiso total

La implicación del ‘11’ es total y lo demuestra jornada a jornada. Además, su compromiso va más allá del acierto/error. Puede no salirle un desmarque, perder una carrera por velocidad o fallar en un remate, pero Morales se rehace y vuelve a intentarlo; nadie puede negar ese afán por superarse cada partido.

El ejemplo más claro pudo verse hace dos jornadas, en el Nuevo Los Cármenes. Morales arrastraba un esguince de tobillo del último partido ante el Celta, pero no faltó a la cita y jugó de titular.

Marca y también asiste

Morales también se apunta en su cuenta particular una asistencia, la que dio a Melero para hacer el empate (1-1) en El Sadar. Curiosamente, ya está a una de igualar las dos que repartió en la 19/20 y ésta pudo llegar el pasado fin de semana ante el Alavés. Curiosamente llegó con los mismos protagonistas que en Pamplona. Desbordó por banda y puso un centro medido en la cabeza de Melero, que en boca de gol se llenó de balón y mandó su testarazo por arriba.

El Levante UD golea con buen juego al Abanca (4-1)

Un Levante superior en fútbol y en goles impuso su ley de principio a final ante el Abanca en un partido en el que no dio opción al rival y que tuvo una de sus claves en los dos primeros tantos, marcados antes del minuto diez de juego. Tras poner Carol Férez y Andonova muy pronto el 2-0 en el marcador. Sin apretar más el acelerador, una nueva aproximación a la meta del conjunto coruñés propició el 3-0, obra de Irene Guerrero a la media hora de juego. Esther mandó un balón al larguero (m.67) y poco después en la salida de un córner, Cometti hizo el 4-0. Ainhoa recortó para las deportivistas.