El Valencia CF es consciente de lo que tiene entre manos con Yunus Musah y es consciente también de los errores que ha cometido con otros futbolistas. Por eso, las partes están manos a la obra para impulsar sus condiciones contractuales –duración, salario, cláusula– y concretar el blindaje. Musah está contento y radiante, el club está avanzando con paso firme y se puede hablar de renovación encarrilada.

El Valencia CF traslada confianza respecto al futuro del angloamericano, lo hace desde su potente irrupción en pretemporada. Todo está rodando por encima del mejor planteamiento previsto, en el que ya estaba contemplado su presencia en dinámica de primer equipo, y eso está jugando a favor. Musah está volando en cohete: es titular, ha dado el salto internacional con Estados Unidos, Inglaterra no quiere perderlo y siempre ofrece buen nivel, siempre cae bien.

Cada paso es una zancada, el interés de todo tipo de pretendientes está latente desde siempre y eso también ha obligado al Valencia CF a agilizar los movimientos, como es lógico.

Entre Musah y el club hay buena onda. La disposición del futbolista es ideal: está feliz, está convencido y está agradecido por la confianza. Esto es clave. Yunus apostó por el Valencia por la calidad del proyecto, por el programa de lanzamiento y por la política de puertas abiertas al talento surgido desde la Academia. Por eso dejó el Arsenal y por eso decidió rematar su formación en la ciudad deportiva de Paterna en lugar de decidirse por otras experiencias en clubes importantes.

Una puerta al mundo

No todo puede valorarse desde los extremos. La apuesta tiene un efecto llamada positivo. Los jugadores jóvenes son conscientes de que, más bien que mal, aquí pueden tener una oportunidad, de que –pese a todos los problemas e imperfecciones– al menos hay un camino en línea recta a la élite para ellos. Hugo Guillamón, Kang In, Álex Blanco, Esquerdo o Rivero sostienen la línea de la generación Carlos Soler-Toni Lato, que antes fue la de Gayà. La grieta está en la gestión de algunos de esos casos y de muchos otros casos con futbolistas que ya no están.

Musah es una oportunidad para hacer mejor las cosas, un tren que el club no puede dejar escapar a nivel deportivo y marquetiniano, a nivel económico. Con permiso de Gayà o Soler, el Valencia CF no tiene un reclamo internacional más potente. Yunus es una puerta de entrada al mundo, como inglés, como miembro del Team USA, por sus raíces africanas, por su niñez en tierras italianas y por su potencial, sobre todo. En las últimas semanas, Musah ha hecho goles, ha hecho buenos partidos y ha conseguido que se hable para bien del Valencia CF en medio mundo, en cadenas de deportes muy importantes en Estados Unidos y en publicaciones que no necesitan presentación como Sports Illustrated. Javi Gracia ha cometido errores, pero con Musah ha hecho pleno.