El Valencia ha perdido salida de balón y fluidez en la circulación en los dos últimos dos partidos contra el Eibar y Athletic provocando un encefalograma plano en el centro del campo. Muy pocas veces Carlos Soler ha maniobrado con ventaja por dentro. Uno de los futbolistas que puede ayudar en fase ofensiva es Hugo Guillamón. La vuelta al grupo del canterano, ya recuperado de su lesión muscular en el isquio, tiene un doble valor para el equipo.

Atacar mejor pasa por recuperar la salida limpia de balón y Hugo ha demostrado sobradamente que es una garantía con visión de juego, precisión en el pase y capacidad para superar líneas y ofrecer ventajas a los centrocampistas con balones en mejores condiciones. Hugo vuelve a estar a disposición de Javi Gracia y esa es una buena noticia para este Valencia plano, previsible y fallón que no aprovecha sus recursos (por pocos que sean).

El de l’Eliana se incorporó al grupo este domingo después de dos semanas apartado de los terrenos de juego. Justo el plazo que le marcaron los médicos al conocer el resultado de las pruebas. Ni un día más, ni un día menos. El canterano sufrió una afectación en el tendón del isquio contra el Atlético y, aunque esquivó la rotura, ha estado dos semanas de baja.