Tras el encuentro, Jaume Ponsarnau señaló que habían empezado «un poco tanteando y buscando ellos el ritmo y nosotros intentando tener ritmo. El ritmo defensivo era un poco mejor nuestro a partir de sus desaciertos. El partido ha cambiado por culpa nuestra, la entrada de Gielo y Jelinek en el segundo cuarto nos ha desequilibrado y no hemos dado respuestas adecuadas, de baja concentració, y de bajo compromiso por no defender más duro para no darles ventajas». Tras el descanso, «queríamos empezar serios, pero han entrado en confianza y ha sido remar contracorriente. Nos han ganado merecidamente, toca pensar en el siguiente partido», Sam Van Rossom, por su parte, señaló que aunque «empezamos bien el partido, desde el segundo cuarto ellos han tenido más confianza, han empezado a correr y a meter y hemos tenido muchas dificultades para conseguir parar su juego».