Adiós a los fantasmas en la Copa de España. Este Levante UDFS es otro equipo capaz de lo (im)posible y ante el Futbol Emotion Zaragoza salvó el primer escollo en el torneo que acoge este fin de semana el WiZink Center de Madrid, con asistencia de público (limitado a 1.500 espectadores).

Los goles de Marc Tolrà y de Rafa Usín sirvieron para remontar el de Dian Luka y para meter a los de Diego Ríos en una semifinal histórica ante su bestia negra en esta competición, ElPozo Murcia, o el actual campeón, el Barça, que completan esta noche los cuartos de final.

El palo impidió a los granotas, líderes con cinco puntos de ventaja en la LNFS, adelantarse nada más empezar con un disparo de Pedro Toro, casi sin ángulo. Y acto seguido, Fede despejó ante Eloy Rojas otra ocasión clara de gol. Un mano a mano de Esteban contra Iván Bernad que desvió el pívot del conjunto maño fue un nuevo aviso, pero el gol llegó por medio de Dian Luka a los 8 minutos.

Poco le duró la alegría a los aragoneses, eso sí, puesto que después de que Pedro Toro rozara el empate con un tiro cerca de la escuadra, una contra bien llevada entre Roger y Marc Tolrà acabó con el internacional español empatando el encuentro en el minuto 11.

El partido estaba sin dueño, con gran intensidad, pero nadie lograba acercarse con peligro a puerta. Había que apelar a la genialidad, la que permitió a Roger zafarse de dos contrarios a la media vuelta y asistir a Rafa Usin, que no perdonó para completar la remontada a tres minutos para el descanso.

En la reanudación Eloy Rojas probó los reflejos de Fede, que como Iván Bernad se había erigido en uno de los baluartes de su equipo impidiendo que el marcador fuera más abultado. Minutos después, ambos protagonistas repitieron a disparo en carrera de Rojas. Roger, Tolrà y Gallo tuvieron la réplica granota, pero sin encontrar portería mientras la intensidad no menguaba, con un Zaragoza necesitado de un nuevo gol para mantenerse con vida, y momentos de tensión en el ecuador en el segundo tiempo.

Fede volvió a aparecer ante disparo de Retamar desde la lejanía, única opción ante la imposibilidad de cruzar las líneas debido a la presión y a las faltas de ambos equipos. Y cuando alguien lo lograba, como Roger y Rivillos, ahí estaba Iván Bernad. Igual que Fede, que en los minutos finales volvió a ser providencial incluso a volea de Javi Alonso con los de David Marín ya jugando de cinco con portero-jugador.

Diego Ríos quería evitar un partido loco como el que hizo el Zaragoza en Peñíscola con dos goles en el minuto final, y pidió un tiempo muerto, a dos para la bocina. Y es que un empate obligaba a jugarse las semis a los penaltis. Fede paró otra, el balón le cayó a Rivillos, que de volea casi acierta a puerta vacía. El último tiempo muerto, de David Marín, con solo 30 segundos por delante, solo sirvió para forzar una falta a 1.1 segundos y 11 metros, que llevó el balón a Jabur, quien escorado, lanzó fuera. El Levante, a un paso de una final.