Semana de Eurocup Women, semana de la Final Four de Szekszard, en Hungría, donde el Valencia Basket aspira a lograr el primer título de su historia. «Ya empezamos a tener el gusanillo, esta es la semana, estamos donde queríamos, en la lucha por un título y vamos a darlo todo», confesaba a Levante-EMV en estas horas previas Laura Gil. La pívot murciana es, sin lugar a dudas, uno de los grandes referentes de un equipo que llega a la cita sin lesiones y con todas las jugadoras a disposición del técnico Rubén Burgos. «En este momento de la temporada, viendo lo que le está pasando a otros equipos, es un punto importante para el grupo», destacó Gil, para la que una de las virtudes taronja es que «somos una plantilla muy larga. Hemos demostrado que las doce pueden estar en la pista y no hay una gran diferencia. Eso va a ser un plus, podemos dar una intensidad alta al partido y si alguien está cansada va a salir otra desde el banquillo para intentar ganar».

Y lo dice una jugadora que, más allá de todos los éxitos logrados con la selección española, sabe también lo que es ganar una Euroliga. Eso sí, le pilló muy joven, con apenas 18 años, en el Perfumerías Avenida. «Fue una experiencia única pero en aquel momento dije que quería jugar otra Final Four pero jugando porque ese año jugué muy poquito. Aprendí mucho, pero tengo ganas de jugar otra con minutos en pista», recordó la murciana. «Al final es la primera vez que juego una Final Four de la Eurocup, el club también, va a ser muy especial por muchos motivos. Me considero una persona ganadora, y cuando participas mucho más estás muy involucrada y se siente mucho más. Ese año de la Euroliga fue impresionante por todo, pero espero que este fin de semana podamos estar celebrando algo muy especial», subrayó la pívot taronja, cuya experiencia tiene hoy por hoy un valor incalculable dentro del grupo. «Intento aportar todo lo que creo que puede ayudar al equipo. Es mi naturaleza al final. Me considero una jugadora de equipo y es muy importante que la jugadora que esté a mi lado esté en un buen momento, esté jugando bien para que al final podamos ganar que es de lo que se trata. Si en algún momento puedo ayudar aportando mi experiencia, conocimientos o algún movimiento a alguna compañera pues lo hago», dice.

Sin confianzas

El encuentro del viernes ante el Carolo Basket es «la primera final porque si no ganas ese partido no hay opciones de título. Es importante saber controlar los nervios. El hecho de haber vivido una experiencia parecida en la Copa nos puede ayudar a sacarlo adelante de la mejor forma posible», explicó Gil, para la que dado que «los equipos franceses son muy físicos, va a ser un partido duro». Pese a ello, tiene claro que «sí estamos centradas en nosotras y hacemos las cosas bien, vamos a tener muchas opciones. Al final depende de nosotras. Carolo va a poner las cosas difíciles pero tenemos equipo y una plantilla grande y con calidad para sacar el partido». Sería la mejor manera de quitarse «la espinita en esa final de la Copa, de que las cosas no salieran bien. Es bastante reciente y sabemos lo que significa. Eso va a ayudar».