Los Angeles Lakers se olvidaron de las dudas y las bajas y aplastaron este martes a los Toronto Raptors (101-110) con artillería pesada desde el triple y con un Marc Gasol dominador en la pintura.

El marcador resultó engañoso, ya que los Lakers ganaban por 34 puntos en el segundo cuarto, entraron al último parcial con 20 puntos de ventaja, y solo en los minutos de la basura Pascal Siakam salvó el honor de los de Toronto sin que peligrara la victoria visitante.

Como complemento al show de los Lakers desde el perímetro (13 triples al descanso), Gasol no mostró compasión por sus excompañeros de los Raptors, con los que ganó el anillo de la NBA en 2018-2019, y sumó 13 puntos (su anotación más alta de la temporada), 9 rebotes, 5 asistencias y 4 tapones frente a 5 pérdidas en 28 minutos.

Gasol volvió a salir de pívot titular, ante la ausencia del lesionado Andre Drummond, y fue la única referencia interior de los angelinos después de que Montrezl Harrell fuera expulsado por una absurda tangana con OG Anunoby en el primer cuarto.

La llegada de Drummond desplazó al banquillo a Gasol, quien ha admitido recientemente que no ha sido fácil para él procesar este cambio de situación. Pero el desafortunado debut de Drummond, que se lesionó el pasado miércoles en su primer partido, abrió las puertas a la titularidad de nuevo a Gasol, que ha respondido con actuaciones notables.

La contundente victoria de este martes permitió tomar aire a los Lakers, que con sus tres estrellas de baja (LeBron James, Anthony Davis y Andre Drummond) se han mostrado como un equipo muy irregular. El triunfo sobre los Raptors fue posiblemente su mejor partido sin James y Davis, pero el anterior encuentro, la dura derrota ante Los Angeles Clippers del domingo (104-86), se saldó con su anotación más baja en lo que va de temporada.

Los de púrpura y oro tienen ahora 32 victorias y 19 derrotas y siguen en la pelea por la cuarta plaza de la Conferencia Oeste ante los Denver Nuggets. Talen Horton-Tucker (17 puntos) fue el máximo anotador de unos Lakers muy corales con siete jugadores por encima de la decena de puntos.

Por parte de los Raptors, que no contaron con dos jugadores cruciales como Fred VanVleet y Kyle Lowry, el principal recurso ofensivo fue Pascal Siakam con 27 puntos (17 en el último cuarto). Con 20 victorias y 31 derrotas, los canadienses se encuentran muy lejos de los puestos de play-off en el Este.

Festival de triples

Los Lakers no han destacado esta temporada por su precisión en el perímetro, pero en el primer cuarto se regalaron una fiesta desde la línea de tres. Los angelinos conectaron 9 triples (en 13 intentos, 68 %) para controlar perfectamente el inicio del partido con un Markieff Morris letal en el exterior.

Gasol también se puso las botas pero en la zona. En los primeros siete minutos, el pívot fue el amo y señor del juego interior y logró 9 puntos (4 de 5 en tiros, 1 de 1 en triples), 5 rebotes y 2 asistencias. La rabia e intensidad de Gasol, que se dio el lujo de dar una asistencia sin mirar para un triple de Morris, se contagió a todo el equipo (28-40 antes del segundo cuarto).

Pero al final del primer parcial, y en un duelo sin ningún tipo de aspereza hasta entonces, un estúpido rifirrafe entre OG Anunoby y Denis Schroder acabó con el primero expulsado y con Montrezl Harrell también en la ducha por meterse donde no le llamaban.

Ajenos a polémicas arbitrales, los Lakers metieron una marcha más en el segundo cuarto. Un enorme parcial de 2-17 hasta el ecuador del segundo cuarto, con un gran esfuerzo defensivo, permitió a los Lakers lograr ventajas abismales y sonrojantes que superaron los 30 puntos (32-62 a falta de cinco minutos). Todas las piezas de los angelinos brillaban, incluidos reservas muy inspirados como Alex Caruso o Wesley Matthews, y al descanso se marcharon con el partido prácticamente decidido (42-68).

Las estadísticas no mentían: los Lakers consiguieron en la primera mitad un fabuloso 59% tanto en tiros de campo (25 de 42) como en intentos de tres (13 de 22) y se impusieron en la lucha por el rebote con claridad (35 a 19). Frente a esa demostración de poderío, los Raptors presentaron un lamentable 19% en triples con solo 3 de 16.

Con los deberes hechos, los Lakers salieron en la reanudación sin forzar la máquina y los Raptors llegaron a bajar de los 20 puntos. Pero el colchón era tan grande que, con las puntuales pero decisivas aportaciones de Talen Horton-Tucker, los Lakers mantuvieron la situación totalmente bajo control. En el último cuarto, los angelinos se dejaron llevar y un excepcional pero tardío Siakam disimuló la clara inferioridad de los canadienses a lo largo de todo el encuentro.

Los Lakers continuarán su gira por el Este el jueves frente a los Miami Heat, mientras que los Raptors se enfrentarán el mismo día a los Chicago Bulls.