Dubljevic, sonriente, ayer en la Fonteta. | J.M.LÓPEZ

Ganar o ganar. Ahora sí que no queda otra... al margen de esperar otros resultados que permitan certificar la clasificación para el Top-8. La última jornada de la fase regular de la Euroliga se presenta así de emocionante para un Valencia Basket cuyo proyecto depende de lo que suceda en las próximas horas. Entrar en los playoffs en la llave que garantiza el billete para participar en la próxima edición de la máxima competición continental. Un objetivo prioritario para una entidad que quiere continuar creciendo de manera sostenida. Así, en medio de la lucha por las dos últimas plazas para disputar los playoffs, dos son las cosas tienen que pasar para que los de Jaume Ponsarnau se aseguren seguir compitiendo contra los mejores de Europa el próximo curso.

La primera es ganar esta noche al TD Systems Baskonia, que pelea también por el Top-8, y la segunda es que los otros dos rivales directos, el Real Madrid y el Zenit San Petersburgo, pierdan uno de los tres encuentros que todavía deben disputar. Ambos equipos ocupan ahora mismo la séptima y la octava posición de la clasificación. Así, los taronja podrían clasificarse ya hoy mismo pues el Real Madrid visita, a las 19:45 horas, la pista de un Fenerbahçe que lucha por asegurarse el factor campo en el cruce de cuartos. Por tanto, todo el entorno taronja tendrá también esta tarde un ojo en Estambul. Y es que de tener que esperar a lo que haga el Zenit, que tiene un encuentro aplazado, habría que irse a mañana, cuando los rusos reciben al Maccabi Tel Aviv (19:00 horas). O incluso más, al lunes 12, cuando cerrarán su fase regular también en casa ante el Panathinaikos.

Lo primero, sin embargo, es superar a un TD Systems Baskonia que llega a La Fonteta con el mismo balance que los valencianos, una posición por encima en la clasificación y con una situación muy parecida en términos de meterse en los playoffs. El equipo de Dusko Ivanovic tiene a su favor su excelente momento de forma, lo que le ha permitido meterse en la pelea por el Top-8 con nueve victorias en diez partidos -entre las jornadas 23 y la 32-, aunque su derrota de la jornada pasada en la prórroga ante el Anadolu Efes hace que tampoco dependan de sí mismos. Con la explosión del italiano Achille Polonara -30 de valoración de media en los últimos tres partidos de Euroliga- como nuevo líder estadístico de los baskonistas, otro de sus referentes como es el base Pierria Henry -segundo mejor asistente de la Euroliga- es duda tras sufrir un esguince en el tobillo derecho en el partido del fin de semana ante MoraBanc Andorra.

Por su parte, Jaume Ponsarnau, podrá disponer de todos sus hombres una vez confirmada la recuperación de Martin Hermannsson. Por tanto, deberá realizar dos descartes técnicos antes del encuentro. «Martin ha entrenado muy bien, a pesar del tiempo que ha estado fuera se le ha visto fresco y vamos a poder contar con él. Vamos a decidir en función del entrenamiento de hoy -por ayer-, pero claramente está disponible a no ser que pase algo», informó el técnico.