Un taconazo y un cabezazo directos a la historia. Contra Eslovaquia, Ferran Torres tardó únicamente 44 segundos en incluir su nombre en un club selecto y de muy complicado acceso, el de los futbolistas valencianos que han logrado marcar en una fase final de la Eurocopa. Además, el atacante de Foios ha roto con una sequía de 25 años sin tantos valencianos. La fiesta la completó el villarrealense Pau Torres. Hasta el momento, solo tres futbolistas lo habían conseguido.
Francisco “Lobo” Carrasco (Alcoi, 1959) y Antonio Maceda (Port de Sagunt, 1957) lo consiguieron en la Eurocopa de 1984, en la que España llegó a la final, en la que caería ante la Francia de Michel Platini. Los goles del atacante y del defensa, entonces en el FC Barcelona y el Sporting de Gijón, fueron trascendentales en el avance de la selección. Carrasco se estrenó como primer valenciano en marcar en la Eurocopa al adelantar a España ante Rumanía, de penalti (1-1). En un torneo con solo ocho selecciones, tras empatar ante Portugal (1-1, Santillana) el último encuentro del grupo definía el pase a semifinales. Enfrente estaba la República Federal de Alemania, a la que nunca se había derrotado en una fase final. Carrasco falló un penalti, pero con un cabezazo en los últimos compases del encuentro, Maceda batía a Schumacher y colocaba al conjunto de Miguel Muñoz, en el que también estaba representado el valencianista Roberto, a las puertas de la final.
En las semifinales, frente a Dinamarca, Maceda puso por delante a España, Lerby empató para los daneses y en la tanda de penaltis, la Roja no erró ninguna pena máxima.
Habría que esperar doce años para ver el siguiente gol valenciano en una fase final. Sucedió en Inglaterra 96 y en otro partido crucial. Frente a Rumanía, en Leeds, España se jugaba el pase a cuartos de final. Manjarín marcó el primero, pero antes del descanso Raducioiu empataba, a pase de Hagi. En los instantes finales, con el partido en plena tensión, Guillermo Amor (Benidorm, 1967), marcó el tanto definitivo del cuadro de Javier Clemente, llevando la locura a las gradas de Elland Road, llenas de emigrantes españoles. El futbolista alicantino, nada más acabar el encuentro, se marchó a España para asistir al nacimiento de su hijo. España caería en cuartos, su barrera durante muchos años, en Wembley ante Inglaterra, en la tanda de penaltis.
Desde ese momento, ya no se asistiría a ningún gol valenciano en la Copa de Europa de Naciones. Sí que se asistió a goles de jugadores estrechamente vinculados al fútbol valenciano, como es el caso de Gaizka Mendieta, autor de dos tantos en la Eurocopa de 2000, en la plenitud de su carrera, Jordi Alba (que marcó en la final de 2012 ante Italia), David Silva o de David Villa, autor de cuatro tantos en el torneo de 2008, cuando pertenecía al Valencia y la España de Luis Aragonés conquistó el título por primera vez desde 1964.
A Ferran Torres, que cuenta con la alta consideración de Luis Enrique, se le abre la oportunidad en esta Eurocopa, desde los octavos de final frente a Croacia, de igualar a Maceda y seguir escribiendo su propia historia y la del fútbol valenciano. A favor del atacante del Manchester City computa un factor, como su conexión goleadora desde que debutara en la Roja. Su promedio es de un gol cada dos partidos. En 14 internacionalidades, ya ha marcado 7 goles.
La maldición de Saura
Además, a sus 21 años, se le aparecerá también otra oportunidad, de seguir evolucionando su carrera al ritmo actual, como la de los mundiales. En la gran cita planetaria de selecciones hay otra maldición que tumbar, la del gol de Enrique Saura frente a Yugoslavia en Mestalla en el Mundial 82. Desde esa fecha, hace 39 años, ningún jugador nacido en la Comunitat Valenciana ha vuelto a marcar. Antes del gol de Saura, sólo otros dos valencianos habían logrado marcar en una fase final de un Mundial. El anterior fue el ilicitano Juan Manuel Asensi (1949), leyenda del Barcelona, que en Argentina 78 marcó el tanto de la victoria frente a Suecia, en un partido en el que España jugó en la cancha de Vélez con pantalón blanco y que fue la única alegría del torneo para la Roja, eliminada tras perder contra Austria, y no pasar del empate a cero goles frente a Brasil, con el célebre fallo de Cardeñosa, que lanzó la pelota a un defensa bajo el larguero con el portero vencido.
El primer valenciano que perforó una red rival en un Mundial fue Manuel Sanchis (Alberic, 1938- Madrid 2017) en Inglaterra 66. El lateral, mito histórico del Real Madrid yé-yé, era un defensor veloz y un pegajoso marcador, caracterizado más por la incansable brega que por los destellos técnicos. Pero aquella tarde en Sheffield, en el estadio de Hillsborough, marcó un auténtico golazo frente a Suiza (2-1), sorteando todos los rivales que le salieron a su paso antes de batir de disparo cruzado al helvético Elsener.
