El nuevo proyecto del Valencia Basket va tomando forma. Tras anunciar recientemente la incorporación de Nenad Dimitrijevic y la renovación de Sam Van Rossom, así como que Guillem Vives y Derrick Williams no seguirán en el equipo, la entidad taronja continúa avanzando en los siguientes frentes que tiene abiertos. Estos no son otros que resolver la situación del resto de hombres que acaban contrato el 30 de junio. Es decir, Joan Sastre, San Emeterio y Marinkovic, además de la especial coyuntura con Kalinic. Una decisión en la que tendrá un gran peso la opinión del nuevo entrenador, Joan Peñarroya, así como el hecho de poder cerrar o no alguna de las operaciones abiertas.

Desde La Fonteta ya se han iniciado los contactos para ampliar la vinculación deSastre. El club le ofrece un contrato a la baja respecto a lo percibido en estas últimas campañas tras la prolongación y aumento de salario firmada en el verano de 2017. En ese momento, y tras la consecución de la Liga Endesa, el escolta balear era una de la piezas más codiciadas del mercado y el club quiso asegurarse así un cupo de garantías para varias temporadas. La situación ahora es muy diferente. Su rendimiento, debido en gran parte a las lesiones, dista mucho del de aquella temporada.

Diferentes son los casos con Fernando San Emeterio y Vanja Marinkovic, sobre los que el club tiene una opción para prolongar su vinculación una temporada más. Ambos dependen en gran medida de las operaciones que hay en marcha en el mercado, y también de si finalmente se va a una plantilla de 12 o 13 jugadores.

El Valencia Basket incluyó el viernes a Nikola Kalinic en el derecho de tanteo aunque es consciente de que su prioridad es jugar la Euroliga.