Tras treinta minutos sin encontrar su juego y lejos de su mejor versión, el Real Madrid despertó a tiempo y resolvió, en un gran último cuarto de Sergio Llull, un partido que se le había complicado en exceso ante un combativo Monbus Obradoiro que, aunque se llevó dos parciales, no pudo frenar el acelerón final de un rival que sigue invicto, a la espera debutar este jueves en Euroliga (78-68).

El base balear, sin protagonismo hasta entonces, apareció en la última acción del tercer cuarto para empatar el choque con un triple sobre la bocina que espoleó a los suyos y prolongó su buen momento de juego en unos últimos diez minutos en los que, con otros nueve puntos, lideró a un Real Madrid que sufrió más de lo previsto para sumar su tercer triunfo consecutivo.

Porque el equipo gallego saltó al WiZink Center sin complejos y, de la mano de Henry Ellenson y Thomas Scrubb y apoyado en una buena defensa, tomó las primeras ventajas en el marcador que se encargaron de enjugar, en el ecuador del capítulo inicial, los franceses Thomas Heurtel y Guerschon Yabusele.

Los puntos llegaban con cuentagotas y el partido parecía no tener un dominador claro, aunque un primer estirón de los blancos, que coincidió con el apagón de unos visitantes que acumulaban pérdidas y estuvieron cuatro minutos sin canastas en juego, permitió a los de Pablo Laso encadenar un parcial de 14-4 que les despejó el camino y les permitió llegar por delante al final del primer acto (20-13, min 10).

Los de Moncho Fernández acusaban su mala tarde en el tiro exterior, una de sus principales armas, y con un solo acierto en sus primeros once lanzamientos triples la confianza en su juego fue mermando, al tiempo que permitió a su oponente -que tampoco veía aro desde el perímetro- seguir dominando el choque sin forzar demasiado su maquinaria.

Una leve mejoría visitante en defensa, acompañada de varios aciertos cerca del aro, bajaron de nueve a dos puntos la desventaja. Los tiradores parecían tener la pólvora mojada y el marcador se movía al ralentí, con el Obradoiro resistiendo y el Real Madrid buscando mejores sensaciones en su juego para encarrilar el duelo lo antes posible.

Pero solo Vincent Poirier parecía tener las ideas claras. El pívot galo, autor de once puntos en el segundo cuarto, elevó por primera vez la diferencia por encima de la decena de puntos a dos minutos del descanso, al que un Obradoiro que parecía no acusar la mala primera parte de Kassius Robertson logró llegar con vida tras un último arreón (36-30, min 20).

El intercambio de canastas continuó tras el paso por vestuarios. El Real Madrid, tras 22 minutos de sequía desde al arco, anotó sus dos primeros triples con la firma de Fabien Causeur, aunque poco después vio cómo Walter Tavares cometía su cuarta falta y se iba al banquillo antes de lo previsto. Las dudas asaltaban a los blancos, que no lograban contrarrestar la defensa planteada por Moncho Fernández.

Un triple de Álex Suárez y una acción de 2+1 de Scrubb apretaron el marcador al máximo y obligaron a parar el partido a Pablo Laso, que no encontraba soluciones al atasco ofensivo de sus jugadores. En la siguiente acción el argentino Fernando Zurbriggen puso por delante, muchos minutos después, al equipo santiagués al culminar un parcial de 0-11.

A los últimos diez minutos se llegó con empate a 51 puntos tras un triple marca de la casa de Sergio Llull sobre la bocina que anticipó lo que vendría después. El balear, inédito hasta entonces, tomó las riendas del partido y devolvió las aguas a su cauce con cinco rápidos puntos, bien secundado por Rudy Fernández y Williams-Goss, que dieron la máxima ventaja a los suyos en el ecuador del último acto (66-55, min 35).

Moncho Fernández se desesperaba en la banda. Sus dos tiempos muertos no tuvieron efecto porque los locales ya estaban lanzados a por el triunfo y siguieron completando su mejor cuarto hasta el 78-68 final. El jueves les espera en su debut de Euroliga el Anadolu Efes, vigente campeón continental.

Ficha técnica:

78 - Real Madrid (20+16+15+27): Heurtel (4), Causeur (11), Hanga (2), Yabusele (9) y Tavares (5) -cinco inicial-, Williams-Goss (9), Fernández (8), Vukcevic (1), Poirier (13), Llull (12), Abalde (-) y Taylor (4).

68 - Monbus Obradoiro (13+17+21+17): Hobbs (6), Robertson (11), Scrubb (11) Suárez (6) y Ellenson (20) -quinteto titular-, Okouo (8), Zurbriggen (4), Oliver (-), Beliauskas (-), Birutis (2), Muñoz (-) y Filipovity (-).

Árbitros: Jordi Aliaga, Javier Torres y Carlos Merino. Sin eliminados.

Incidencias: Partido de la tercera jornada de la Liga Endesa disputado en el WiZink Center.