Cuatro años después de que València viera el primer récord del mundo en sus calles, el de Joyceline Jepkosgei en 2017, con 1h04:51, el Medio Maratón València Trinidad Alfonso EDP lo volverá a intentar. Esa marca es ahora la sexta en el ranking mundial de todos los tiempos en los 21,097 km, después de que este mismo viernes World Athletics invalidara el actual récord del mundo de 1h03:44 de la etíope Yalemzerf Yehualaw «por cuestiones técnicas de la carrera, de medición del recorrido», según explicó el presidente de SD Correcaminos Paco Borao en la presentación de la élite internacional, junto a la propia atleta.

«Era 54 metros más corto, unos diez segundos», aclaró Marc Roig, seleccionador internacional, sobre la carrera celebrada en Larne, Irlanda, el 29 de agosto, «por lo que creemos que Yehualaw ya ha corrido por debajo de 1h04, y es muy posible que pueda atacar ese récord. El objetivo es el mismo, solo cambia el tiempo que hay que atacar». Así las cosas, València lo tendrá un poco más fácil este domingo para recuperar el cetro mundial femenino, pues el nuevo registro a batir es el de 1h04:02 de la keniata Ruth Chepngetich en Estambul, el 4 de abril de este mismo año.

Junto a la etíope, que aseguró llegar «en buen estado de forma» y «lista para volver a batir el récord»con un tiempo objetivo de «63 minutos y 30 segundos», otra favorita es su compatriota Letesenbet Gidey, plusmarquista mundial de 15 km y de 5000 metros en pista, precisamente hace un año en València, y que, como recordó Marc Roig, «estuvo a punto de venir a la Elite Edition y no pudo por circunstancias ajenas al atletismo, y este año se ha acordado de nosotros y quiere batirlo».

A pesar de ser novata en la distancia, se mostró incluso más ambiciosa: «Ya sé lo que es competir en Valencia. Es mi primera Media pero puedo batir el récord. 62:30 segundos puede ser...», vaticinó antes de ser homenajeada por la organización con el cartel con su récord del mundo de 5000 (14:06:62) que se ha podido ver durante el último año en espacios publicitarios de la ciudad, junto al del keniata Rhonex Kipruto por lograr el récord del mundo de 10K (26:24 en 2020). Este buscará acercarse al de Medio Maratón que ya superaron cuatro hombres en la Elite Edition de 2020, aunque la gloria solo fuera para Kibiwott Kandie (57:32). Kipruto, tercero con 57:49, prefiere ser algo cauto: «Estoy contento de estar aquí, el entrenamiento ha ido muy bien. El objetivo es batir esa barrera exigente de los 58 minutos».

Élite nacional

En el 30 aniversario de la carrera, la más multitudinaria en España en pandemia con 12.000 inscritos, también se presentó parte de la élite nacional, con Carlos Mayo (1h00:06), el atleta del CA Serrano Chiki Pérez (1h00:58) y la valenciana del Playas de Castellón Laura Méndez (1h12:58). José Antonio Redolat, seleccionador nacional de la prueba, recordó «que traer a los mejores a València cada vez es más fácil, por el circuito, la climatología, que parece que va a ayudar, y hay una grandísima presencia, y vienen a hacer una de las mejores carreras españolas de todos los tiempos». Carlos Mayo tratará de resarcirse de la decepción por el catarro que frustró su intento de récord de España en el 10K de Laredo, tras prepararse en altitud. «Voy a dar mi cien por cien, con salida conservadora porque es mi forma de correr y a ver lo que dan las piernas. Con el cariño que tengo a València del año pasado espero estar a la altura».

Chiki Pérez tiene buen recuerdo de València, con 28:12 en el ecuador de la prueba en 2019. «Llevaba mucho margen y pude hacer muy buena marca. Este año he corrido más rápido el 10000 que en 2019, en 28:30, y en pista 27:46. Voy a salir a por todas aquí en Valencia, ante mi club, espero dar todo lo que tenga».

Y Laura Méndez, tras desfallecer y abandonar en su debut en el maratón olímpico de Tokyo, «una experiencia que no me quitará nadie», según dice, recordó que «quería venir a Valencia a hacer mi marca personal, pero empecé con una lesión y haré lo que pueda. Llego bien, sorprendida, voy a a hacerlo lo mejor posible, los que me conocen saben que no voy a salir a pasearme».