Doce mil corredores llenarán hoy las calles de Valencia, la ciudad del running, como no se veía desde antes de la pandemia, hace dos años. Con el levantamiento de las restricciones ante la mejora de la situación sanitaria, no ha hecho falta PCR, ni pruebas de antígenos, ni pasaporte covid. Tan solo mascarilla obligatoria en zonas comunes, salvo en carrera, y sentido común. València, que reactivó el running presencial lo antes que pudo con la carrera Valencia Corre y más tarde con el 10K Valencia Ibercaja, ambas con oleadas de salida, da un nuevo salto cualitativo hacia la normalidad con el Medio Maratón Valencia Trinidad Alfonso. La de hoy es la prueba más multitudinaria de la distancia celebrada en España hasta la fecha, desde que en julio se anunció que habría corredores populares hasta un máximo de 12.000, después de las Elite Edition celebradas en 2020 y que asombraron al mundo, especialmente el Medio Maratón, con hasta cuatro atletas por debajo del récord del mundo de Kamworor. Este domingo los organizadores mantienen el premio de 70.000 euros para el atleta que acabe con el récord del mundo de Kibiwott Kandie (57:32) y el de Ruth Chepngetich (1:04:02). Aunque las autoridades ya no obligan a salidas escalonadas, la organización las mantendrá, por comodidad y seguridad, con 4.000 corredores en cada una de las tres oleadas. El mejor ensayo general para el Maratón Valencia Trinidad Alfonso EDP del 5 de diciembre, que tendrá una cifra máxima de 18.000 corredores, y que espera tener las mismas (o mejores) condiciones sanitarias que ahora, con una baja incidencia de contagios y un elevado porcentaje de vacunación, que permita correr sin necesidad de PCR, antígenos o pasaporte.

Ayer, favoritos como Rhonex Kipruto, Letesenbet Gidey y Yalemzerf Yehualaw, entre otros, entrenaron de forma suave en el jardín del Turia, en una jornada en la que cerró la Feria del Medio Maratón después de dos días en su nueva ubicación al aire libre junto a la Avenida de los Naranjos, zona de salida y llegada, con acceso restringido para que los corredores y acompañantes retiraran sus dorsales, pulseras de acceso a sus boxes de salida, y la camiseta conmemorativa. El público en general, al contrario que hace un año para la Elite Edition, podrá volver a salir a animar a las calles de València, donde más de 800 voluntarios velarán por la normalidad. La organización ha incrementado en un 50 por ciento el gasto en limpieza e higiene en todas las áreas de la carrera.