El español Pablo Carreño (19) sufrió ante el neerlandés Tallon Griekspoor después de imponerse por un apretado 6-3, 6-7(6), 7-6(3), 3-6 y 6-4 en un choque que alcanzó las cuatro horas y diez minutos. Por su parte, Carlos Alcaraz (31) superó con facilidad al serbio Dusan Lajovic por 6-2, 6-1 y 7-5.

El holandés Griekspoor cortó una racha de 29 partidos ganados desde su derrota en el último Abierto de Estados Unidos frente al serbio Novak Djokovic en segunda ronda.

Griekspoor, que se bajó del Melbourne Summer Set recientemente antes de su encuentro contra Nadal, se convirtió en el tenista más exitoso en una temporada en el circuito Challenger después de cosechar 8 títulos en la pasada temporada.

El asturiano se clasificó para la tercera del Abierto de Australia por sexto año consecutivo y se enfrentará en la siguiente prueba al vencedor del choque que mantendrán el estadounidense Sebastian Korda y el francés Corentin Moutet.

Además, el español firmó uno de los puntos de una tercera jornada marcada por los fuertes vientos en las pistas exteriores después de alcanzar una dejada que regresó al campo contrario por el lateral.

En su primer partido, el tercer clasificado español superó sin complicaciones al argentino de la previa Tomás Martín Etchevarry por 6-2, 6-2 y 7-6(2).

Fácil victoria de Alcaraz

Alcaraz, que superó a Tabilo en primera ronda en un partido en el que no se superaron los cuatro intercambios de peloteo, se convirtió en el tenista más joven con 18 años y 270 días en alcanzar la tercera ronda del Abierto de Australia después de superar el registro del local Bernard Tomic en 2011 con 18 años y 101 días.

Alcanzó también por primera vez en su carrera la tercera ronda en Melbourne Park después de su tropiezo en la segunda ronda de la edición de 2021 frente al sueco Mikael Ymer.

Alcaraz decidió cortar muchos largos peloteos con subidas a una red en la que se sintió muy cómodo después de concretar hasta 22 voleas.

Su ritmo frenético y agresividad no se vieron intimidados por el enfurecido viento después de conectar 27 golpes ganadores que contrastaron con los ocho de su rival.

La joven promesa española podría enfrentarse en la siguiente ronda al italiano Matteo Berrettini (7), que se verá las caras con el estadounidense invitado Stefan Kozlov en segunda ronda.

Fue precisamente ante el transalpino en Viena una de sus grandes victorias de la edición pasada junto a su épico triunfo ante el griego Stefanos Tsitsipas (4) en el Abierto de Estados Unidos.

Triunfo de Badosa

En el cuadro femenino, la española Paula Badosa (8) se clasificó por la vía rápida después de pasar por encima de la italiana de la previa Martina Trevisan por un severo 6-0 y 6-3 en la segunda ronda del Abierto de Australia. “Ella es una luchadora, tiene una historia muy bonita. Estoy muy feliz de haber conseguido la victoria”, comentó tras igualar su mejor marca en el grande australiano.

Badosa impresionó al escaso público que se asomó en el primer turno matutino por la Rod Laver Arena después de dejar a cero a su rival en un primer set en el que concedió tan solo cuatro puntos al saque. La tenista española nacida en Nueva York redujo la capacidad defensiva de la florentina con un repertorio que fue desde oportunos cambios de altura, aprovechando la baja estatura de su rival, hasta agresivos paralelos que desmontaron el orden con el cruzado de la italiana.

La gerundense disipó las dudas sobre su físico después de que recibiera tratamiento médico durante la primera manga de su primer choque ante la local Ajla Tomljanovic. Llegará en plenas condiciones a su cita de tercera ronda después de cerrar el pase tras una hora y diez minutos, y se cruzará con la ucraniana Marta Kostyuk, que ocupa la posición 66 de la lista WTA y con la que mantiene una gran relación de amistad.

Sorribes dice adiós

La española Sara Sorribes (32) no pudo con la joven ucraniana de 19 años Marta Kostyuk en una jornada marcada por el viento al caer por 7-6(5) y 6-3 en la segunda ronda. A pesar de que jugó con determinación los puntos importantes, con un cuatro de cuatro en puntos de rotura, la castellonense sumó unos escasos nueve golpes ganadores que contrastaron con los 33 de la ucraniana. Sorribes no pudo superar su mejor registro a orillas del río Yarra que databa de su segunda ronda conseguida en la edición de 2020.

Por su parte, la granadina Nuria Párrizas sorteó la segunda ronda sin disputar su encuentro después de que su rival, la belga Maryna Zanevska, se baje de la competición horas antes del arranque del choque. La suerte volvió a estar del lado de la española de 30 años después de que en primera ronda evitara su cruce con la tunecina Ons Jabeur (9), y tuviera que enfrentarse a la rumana de la previa Irina Bara por la misma razón. Párrizas, que incidió tras su victoria en primera ronda en las positivas consecuencias de trabajar con equipo por primera vez, superó con creces sus expectativas para lo que está siendo su primer cuadro principal en Melbourne. Se enfrentará en la siguiente ronda a la ganadora del duelo entre estadounidenses que mantienen Jessica Pegula (21) y Bernarda Pera.

La bielorrusa Victoria Azarenka (24) y la ucraniana Elina Svitolina (15) no redujeron la marcha y estarán en la tercera ronda después de superar a la suiza Jil Teichmann por 6-1 y 6-2 y a la francesa Harmony Tan, que se retiró cuando perdía por 6-3, 5-7 y 5-1. Paula Badosa (8) advirtió tras su tropiezo ante ella en Adelaida que Azarenka, campeona en Melbourne por partida doble, está a un nivel brillante y la bielorruso confirmó estas declaraciones con una nueva sólida actuación en la que sólo cometió trece errores no forzados. Su siguiente rival será la ucraniana Elina Svitolina y tendrá la oportunidad de poner más tierra de por medio en el rotundo cara a cara favorable a la bielorrusa (4-0). Svitolina, que nunca levantó un trofeo ‘slam’ a pesar de haber ocupado la tercera posición mundial, intentará sobreponerse a una inspirada Azarenka para seguir con opciones de igualar la cuarta ronda conseguida en la última edición.

Otra de las favoritas, la australiana Ashleigh Barty (1), volvió a firmar una sólida actuación ante la italiana Lucia Brozetti de la previa después de superarla por un doble 6-1 en menos de una hora y se enfrentará en la siguiente ronda a la italiana Camila Giorgi (30). Volvió a convencer en la Rod Laver Arena delante de un vibrante público ‘aussie’ que podría contemplar como una jugadora local rompe la maldición de 44 años sin campeonas australianas. La primera clasificada mundial acumuló un vertiginoso 86% de los puntos con primeros, cuajó 21 golpes ganadores y 14 errores no forzados. La tenista de Queensland cuenta con un cara a cara de 3-0 favorable con su próxima rival, la transalpina Giorgi, después de que se apuntara una dura batalla a tres sets en la última ocasión que se vieron las caras en el Abierto de Australia de 2018.

Badosa: “Tengo una gran relación con muchas jugadoras”

Paula Badosa explicó que tiene una buena relación personal con muchas de sus rivales en el circuito después de su victoria en la segunda ronda del Abierto de Australia. “Tengo una gran relación con muchas jugadoras. Siendo normal y buena persona, es bonito portarse así. Para mí es fácil separar lo que ocurre dentro de la pista y lo que acontece fuera”, comentó después de acceder a una tercera ronda en la que se enfrentará a su amiga ucraniana Marta Kostyuk, verdugo de su compatriota Sara Sorribes. “He seguido a Marta mucho. Es muy talentosa y tiene mucho potencial, así que tendré que sacar lo mejor de mí”, añadió después de superar su mejor registro a orillas del río Yarra.

Paula Badosa tuvo que pedir asistencia del fisioterapeuta durante su primer encuentro después de sufrir molestias en el muslo y la espalda a pesar de su victoria frente a la local Ajla Tomljanovic. “Hoy he estado mejor físicamente y tengo bastante margen para recuperar”, comentó después de abrir el turno matutino en la pista central Rod Laver Arena. “Para mí significa mucho llegar a una tercera ronda aquí. Es un sueño hecho realidad. En España parece poco por todo lo que ha ganado Rafa”, comentó.