Peñarroya pedía afrontar el partido con la mentalidad adecuada y los jugadores respondieron en la pista, dominando desde el inicio y reaccionando a lo grande en un último cuarto, en el que el Fuenlabrada llegó a ponerse a cinco. Fue solo un espejismo y los taronja siguen su buena racha en La Fonteta, donde tras ganar al Fuenlabrada (97-79), no pierden desde hace cuatro meses y sellaron su clasificación para el playoff por 16ª temporada consecutiva, con muchas opciones de ser cabezas de serie.

Con Van Rossom de inicio y Dimitrijevic ya recuperado, Peñarroya apostó por dar descanso a Hermannsson, el jugador más cargado de minutos en el último mes. Y no echaron en falta los taronja al islandés, concentrados desde el inicio para evitar sorpresas ante un rival de la parte baja de la tabla.

Tobey y Puerto fueron los primeros en ver aro, pero fueron dos triples de Hanlan y uno de Van Rossom los que permitieron a los taronja tomar una pequeña ventaja en el marcador (15-10) a pesar del acierto de Meindl y Cheatham también desde el 6,75.

Los locales tenían mejor porcentajes de tiro y encontraban también a Dubljevic y Labeyrie para acabar cerrando el primer cuarto 27-22, con 9 puntos de Olivier Hanlan.

Dimitrijevic abría brecha en la vuelta a la pista y los triples de Van Rossom, López -Arostegui y Oliver Hanlan permitían a los de Peñarroya aumentar su ventaja ante un Fuenlabrada que dependía en exceso de Peters y de los triples de Cheatman, que no impidieron llegar al descanso 47-39.

Alexander y Tobey estrenaban la segunda parte con un duelo de mates, pero los taronja no tardarían en aumentar su ventaja con un parcial de 13-2, con cinco puntos consecutivos de Puerto y seis de Tobey. Los locales llegaron a ponerse con +15 (68-53), pero de nuevo Cheatman y un Emegano que anotó un triple desde el centro del campo y sobre la bocina, acercaron al Fuenlabrada (73-64).

Dos nuevos triples de Cheatman - ya con seis- llevaron los nervios a la grada al poner el 75-70, pero los triples de Van Rossom, López-Arostegui y los buenos minutos de Pradilla y Dimitrijevic, sentenciaron el partido (97-79).