El Maratón deja 27 millones en València

El Maratón Valencia Trinidad Alfonso presentó ayer el informe sobre el impacto económico de la pasada edición, celebrada en diciembre de 2022. El informe, un año más ha sido elaborado por el Ivie, Instituto Valenciano de Investigación Económica, en cuya sede presentaba las conclusiones su director adjunto de Investigación, Joaquín Maudos, responsable del estudio elaborado junto a Eva Benages. Al acto asistieron también el concejal de Deportes, Javier Mateo; el director de la Fundación Trinidad Alfonso, Juan Miguel Gómez y el presidente de Correcaminos, Paco Borao.

El 42 Maratón Valencia supuso un gasto en la Capital del Turia y su provincia de 28,1 millones de euros (el 86,8 % correspondiente al gasto turístico de los visitantes y el 13,2% correspondiente a gasto de organización).

En total, el gasto turístico en la ciudad alcanza los 26.852.359 euros, casi 27 millones de euros en los que sólo se ha contabilizado, según explicó Maudos, el gasto ejercido por los corredores de fuera de la provincia de València y los procedentes del extranjero. «El impacto económico tiene en cuenta cada euro que recibe València y que no hubiese recibido sin el Maratón. Se tiene en cuenta los gastos en organización y el gasto en turismo deportivo realizado por los participantes y sus acompañantes. También se ha excluido los gastos que no se ciñen al ámbito geográfico de la provincia de València».

El Maratón de València, que en 2022 batía su récord de participación con 30.000 inscritos y 27.795 participantes, bate también su récord económico incrementando un 12,8% en términos reales respecto a la edición de 2019. No se ha tenido en cuenta en la comparación la edición de 2021 ya que se celebró con un censo reducido por la pandemia.

El Ivie lleva realizando este minucioso estudio económico de la prueba desde su edición de 2011 lo que permite comprobar su evolución económica. El Maratón ha pasado de dejar en la ciudad un impacto sobre la renta en la ciudad de 1,9 millones a los 17,4 de la presente edición. Esto se debe en gran parte a que el número de participantes extranjeros se ha incrementado un 19% desde entonces pasando del 11% del total de participantes al 52% de 2022. En 2022 la cifra de corredores extranjeros alcanzó las 14.400 personas, lo que supone el 52% del total, frente al 35% que representaba en 2019. Los participantes procedentes de otros países generan un mayor gasto individual, 136,2 euros de gasto medio diario, frente a 116 euros que gasta el corredor nacional.

Para conocer el gasto de los corredores y sus acompañantes se ha hecho una encuesta a 550 participantes. Los corredores procedentes del resto de regiones españolas viajaron en grupos de 3,5 personas de media con 2 días de estancia dejando en la ciudad casi 5,8 millones mientras que los extranjeros viajaron en grupos de 2,8 con 3,8 días de estancia y 20,9 millones de gasto.

La organización del 42 Maratón Valencia costó 5.835.000 euros, de los que el 48% se cubrió con las inscripciones, el 41,3% con patrocinadores y el 10,7% con otros ingresos e instituciones. Por cada euro invertido en la prueba se generó 3 euros de incremento en la Renta en la economía valenciana y cada euro de coste de organización a su vez se multiplicó por 4,6 en gasto turístico. Los 32,7 millones de euros que suman el gasto asociado a organización y a participantes y sus acompañantes generan un impacto total en la producción de la economía valenciana (ventas de las empresas) de 58,6 millones de euros. Esto se traduce en un impacto real sobre la renta valenciana (valor añadido o PIB, es decir, sueldos, salarios y beneficios de las empresas) que en 2022 alcanzó los 17,4 millones de euros.

El informe del Ivie incluye también un análisis del impacto fiscal del Maratón, pues tanto los gastos asociados a la organización como los de los participantes y sus acompañantes aumentan la recaudación fiscal, vía impuestos y cotizaciones tanto de forma directa como indirecta e inducida, a través del aumento de la actividad productiva y el consumo en la región.

En total, la prueba aportó a las arcas públicas 9 millones de euros, lo que se traduce en que por cada euro gastado en la organización, se generó 1,5 en impuestos recaudados.