Mumbrú apela a la afición para que sea el pulmón
Sin ni siquiera dos días de descanso, con viaje de vuelta desde Estambul incluido, los ‘taronja’ reciben al Manresa
pascual calabuig. València
Esta tarde, a partir de las 17:00 horas, el Valencia Basket cerrará el primer maratón de partido con la visita del BAXI Manresa. Machacado físicamente, el equipo de Álex Mumbrú deberá rehacerse de la primera derrota en la Euroliga, la cosechada el viernes en Turquía ante el Anadolu Efes, sin haber podido disfrutar ni siquiera de un par de días de descanso. Castigado por las lesiones en el juego exterior y, sobre todo, por la acumulación de cinco partidos en diez días, los últimos tres en apenas cinco, el entrenador reclama la ayuda de los aficionados. Además, equipo y afición pretenden reencontrarse después del extraño partido del miércoles en una Fonteta blindada y desangelada con el Maccabi Tel Aviv.
«Sabíamos que llegaríamos un poco fundidos. Volvemos a competir en menos de 36 horas con un viaje entre medias desde Estambul. Además, será un partido duro porque el Manresa juega muy bien al baloncesto y corren. Ojalá podamos encontrar la manera, ojalá en algún momento los lesionados vayan entrando, ojalá pasen muchas cosas. Nos enganchamos bien a los partidos. Este partido va a ser difícil. Jugamos en casa, con la Fonteta. Necesitamos que estén con nosotros, que nos apoye», valoró Mumbrú. El equipo ‘taronja’, por útimo, cuenta con la duda de la participación del alero Semi Ojeleye, ausente en la doble jornada en la Euroliga.
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