La desvinculación de José Marí Olano, concejal encargado de negociar la finalización del Nuevo Mestalla, y la firma de abogados KPMG “relacionada” con Meriton por el vicealcalde Juan Manel Badenas, ha servido a Compromís y PSPV para reafirmarse en su postura sobre dicha relación laboral.
La valencianista Papi Robles considera que este movimiento demuestra que Compromís tenía razón y "existe un claro conflicto de intereses entre la actividad privada de Olano y la actividad pública como concejal que desarrolla en el Ayuntamiento de València. "KPMG demuestra que tiene mucha más ética que la señora Catalá con este paso. Ahora bien, desde Compromís nos mantendremos totalmente vigilantes en cada uno de los pasos, porque no nos fiamos, porque València no se merece tener un estadio low cost para beneficiar a los intereses que pueda tener Peter Lim y el Partido Popular", señala la portavoz de Compromís.
Por su parte, el PSPV coincide con sus excompañeros del extinto Rialo al señalar "la desvinculación laboral del concejal Olano de la consultora KPGM, una de las firmas que ha asesorado a Peter Lim y, por lo tanto, con vínculos comerciales con Meriton, demuestra que su designación como concejal de Grandes Proyectos para negociar con el propietario del Valencia en nombre del Ayuntamiento fue un error gravísimo".
“Este anuncio da la razón a los que denunciamos que había una incompatibilidad evidente en su designación como la persona responsable para negociar con Meriton en nombre del Ayuntamiento mientras trabajaba al mismo tiempo, dedicándole el 75% de su ocupación diaria, para la firma que asesoraba a la empresa propietaria del club. No tenía ningún sentido que el señor Olano se sentase a los dos extremos de la mesa”, manifiestan desde el grupo municipal socialista.
“Es un hecho muy grave que la señora Catalá no ha corregido y que demuestra el oscurantismo y la falta de ética de este gobierno formado por el PP y Vox. Sospechamos que ha sido la propia consultora la que ha tomado la iniciativa para proceder a desvincular a Olano de la firma como consecuencia de la incompatibilidad manifiesta que denunciamos los socialistas para alejarse de los problemas que le ha podido general el concejal”, continúan las mismas fuentes.
“La alcaldesa ha dado muestras de su sectarismo y oscurantismo a la hora de gobernar no sólo con esta manifiesta incompatibilidad sino también ocultando lo que ha cobrado o cobra de la universidad que privatizó cuando era consellera, un asunto del que Catalá debería dar explicaciones de una vez. Pero ni corrigió entonces la incompatibilidad de su concejal ni confiamos en que aplique un criterio exigente con su sueldo opaco", cierran las fuentes socialistas.