El primer revés serio antes de la Copa (86-100)

La derrota del Unicaja era una oportunidad para alcanzarles de nuevo y seguir la estela del Real Madrid en lo alto de la clasificación, pero un Valencia Basket castigado por las ausencias y las molestias de algunos jugadores no pudo evitar la primera derrota de la Liga en casa (86-100) a pesar de que el Barcelona llegaba en un mal momento y habiendo jugado el viernes en Euroliga.

Sin acierto en el tiro y con muchas facilidades en defensa, el partido se le puso de cara al Barcelona, sobre todo tras el primer cuarto, aunque no hay tiempo de lamentaciones y toca levantarse de cara a la Copa del Rey, en la que el Valencia Basket debutará el viernes ante el anfitrión, el Gran Canaria.

Con las inesperadas recuperaciones de Jaime Pradilla y Amida Brimah, pero con las bajas de Jean Montero y de Stefan Jovic (que se sumaban a las de Happ y De Larrea), Pedro Martínez salió de inicio con Chris Jones, López-Arostegui, Semi Ojeleye, Nate Sestina y Nate Reuvers. Antes, Juan Roig había entrado en pista a saludar a Peñarroya y a un Rafa Martínez que fue recibido con aplausos por los aficionados

Con ausencia de hasta tres bases, sobre Jones recaía más responsabilidad aún si cabe y era él precisamente quien abría el marcador en unos primeros minutos de duelos directos entre él y Satoransky y entre Costello y Fall, a quien costaba frenar en la pintura.

Pedro Martínez movía el banquillo con rotaciones cortas, pero la falta de acierto en el tiro frenaba a un Valencia Basket que sí tenía intensidad defensiva para impedir lanzamientos cómodos del rival desde el 6,75.

El Valencia BC no lograba evitar la superioridad del Barça en el rebote pero el 0 de 5 en triples de los de Peñarroya ayudaba a los taronja a mantenerse relativamente cerca, con un 19-25 al final del primer cuarto.

La falta de acierto de ambos desde el 6,75, sin embargo, dio paso a un segundo período en el que los triples fueron la mejor arma de ambos, con un intercambio inicial entre Punter y Costello y con López-Arostegui, Josep Puerto, Nate Sestina y Jaime Pradilla sumándose al festival de triples.

Pese a ello, la defensa taronja no lograba incomodar tanto los lanzamientos del rival, como sí había hecho en los primeros diez minutos y los azulgrana fueron abriendo brecha liderados por Kevin Punter, Metu y Brizuela, quien cerró la primera parte con una canasta sobre la bocina muy protestada y que puso el 37-52.

Con quince puntos abajo, la reacción no podía esperar. La condición de invicto en La Fonteta en esta Liga corría peligro y aunque Jones y Costello volvían a tirar del carro para reducir diferencias, el Barcelona encontraba el camino al aro con más jugadores, para mantener siempre la diferencia por encima de los diez puntos.

Ojeleye y Reuvers, con un triple, respondían a otro anterior de Brizuela y Pradilla ponía al público en pie tras una acción a aro pasado que puso el 57-68 a menos de tres minutos del final del tercer cuarto. La Fonteta aún creía en la remontada y varias decisiones arbitrales encendieron aún más a la grada.

Tras una canasta de Willy, un triple de López-Arostegui ponía el -10 y obligaba a Peñarroya a parar el partido. Y le dio resultado al Barcelona, que encontró en los triples de Parker y Punter el camino para llegar al 65 – 82 con el que se llegó al último cuarto.

Metu no tardaba en poner el -19 en la vuelta a la pista y en el intento de recortar diferencias de forma rápida, los taronja no encontraron el acierto necesario en el triple. Solo Sestina anotaba desde el 6,75, mientras en un mismo ataque, Ojeleye y Jones fallaban tres triples consecutivos.

Los taronja no encontraban ideas en ataque y concedían cada vez más facilidades en defensa hasta el punto de que Pedro Martínez tuvo que parar el partido con un 73-93 tras canastas de Punter y Satoransky a falta de 5:14.

Nada cambió hasta el final, Brizuela y Fall anotaban sin oposición bajo el aro para poner el 75-97 y pese a los dos triples y ocho puntos de Jones en los últimos minutos, Parra llevó a su equipo hasta los 100 puntos, con el 86-100 final.

Una derrota dolorosa pero de la que hay que levantarse de inmediato ante la inminente cita de la Copa del Rey, en la que el Valencia Basket luchará por el primer título de la temporada.