El técnico cerámico español es más productivo que su homólogo italiano. La industria azulejera transalpina necesita 19.692 trabajadores para producir 415 millones de metros cuadrados, mientras que las empresas agrupadas bajo la marca paraguas Tile of Spain produce 530 millones de metros cuadrados de pavimentos y revestimientos cerámicos. Es decir, España produce un 27,71 % más que Italia con una plantilla inferior en un 21,79 %. Las cifras corresponden al ejercicio de 2018.

Los recientes datos divulgados de las patronales azulejeras de Italia y España, Confindustria Ceramica y Ascer, respectivamente, dejan constancia de la optimización del capital humano del sector español, ya que mientras cada técnico cerámico español produce una media ligeramente superior a los 34.415 metros cuadrados anuales, la producción italiana es ligeramente solo supera en poco los 21.000 metros cuadrados por operario y año. Es decir, el técnico cerámico español es un 63 % más productivo que el de Italia.

Eso sí, en lo que se refiere a la rentabilidad, la cosa cambia de manera notable, e Italia toma la delantera debido a que el metro cuadrado de cerámica transalpina se cotiza a casi el doble que el español. Mientras la cerámica italiana se vende a 13,9 euro el metro cuadrado, el de Tile of Spain se vende a 6,6 euros. Según los datos oficiales, la facturación global de Italia ascendió a 5.400 millones de euros en 2018, mientras que las ventas de España en el mismo periodo solo alcanzaron los 3.600 millones de euros. Por lo tanto, cada empleado en la industria italiana genera algo más de 274.000 euros, mientras que el español es responsable de 234.000 euros.

Precisamente, la Asociación Española de Técnicos Cerámicos (ATC) quiere reivindicar y dignificar la figura del técnico cerámico en la evolución de la industria cerámica «y situarlo en el centro del proceso productivo», afirma su presidente, Juan José Montoro, quien anuncia que en la próxima edición de la cita congresual que cada dos años organiza la veterana entidad se quiere «dar continuidad al debate iniciado en la anterior convocatoria, que estuvo dedicada a poner en valor el papel que tiene que desarrollar el técnico cerámico en la transformación de la industria cerámica hacia el modelo 4.0».

De hecho, en la próxima edición del Congreso Internacional del Técnico Cerámico, prevista para los días 7 y 8 de noviembre y que se desarrollará bajo el epígrafe El técnico y la transformación digital, se quiere despejar dudas sobre el papel de los profesionales en la industria cerámica del futuro: «Mientras en anteriores convocatorias pusimos sobre la mesa que la transformación digital eliminará los puestos de trabajo con funciones repetitivas y rutinarias, y ahora queremos dar respuesta a preguntas como qué papel tiene que desempeñar el técnico en esta transformación, qué puestos de trabajo nuevos se están creando o, entre otras cuestiones, cómo se tiene que formar al nuevo técnico cerámico y en qué áreas».

Cita internacional

Castelló volverá a ser escenario del Congreso Internacional del Técnico Cerámico que este año alcanzará su décimo quinta edición. La veterana y prestigiosa cita congresual tendrá lugar en el salón de actos de la Fundación Universitat Jaume I-Empresa (FUE-UJI), en el campus universitario, junto al Instituto de Tecnología Cerámica (ITC), «lo que lo convierte en el escenario perfecto para debatir sobre el futuro de la industria cerámica y sus retos ante la presente transformación digital de la industria», indica Montoro, quien puntualiza que se trata del «verdadero centro neurálgico de la investigación y del talento empresarial y, de manera especial, cerámico».

En este sentido, hay que recodar que, en un principio, se anunció que el congreso iba a celebrarse en el Museu del Taulell, de Onda; «pero por motivos de organización se ha decidido su traslado a la sede de la FUE. Aún así, al congreso se asocian eventos y actividades complementarias que se celebrarán en otros municipios y espacios vinculados a la industria cerámica», ,puntualiza Montoro.

Previsión optimista

Los organizadores confían en superar las cifras de participantes de la anterior convocatoria, la de 2017, y reunir «a más de 250 congresista» con un perfil muy definido: «Profesionales técnicos del sector cerámico, responsable de departamentos de I+D+i, de gerencia, marketing y producción de las empresas cerámicas; así como estudiantes de ciclo superior de cerámica y de grados».

La industria 4.0 «conlleva una transformación digital de todo nuestro proceso productivo para conseguir llegar a la fábrica inteligente, que permitirá a nuestro clúster contar con una fabricación aditiva, flexible, en tiempo real y ofertando un producto completamente personalizado»,, explica Montoro, quien puntualiza que «la transformación digital incorpora y favorece la aparición de nuevas tecnologías que harán posible que sigamos en la vanguardia tecnológica de la fabricación cerámica en el mundo pero, además, también debemos conseguir que nuestros técnicos sigan siendo también los mejores valorados a nivel mundial».