El transporte marítimo juega un papel trascendental en el mundo global en el que nos encontramos. Actualmente, alrededor del ochenta por ciento del comercio mundial se canaliza a través de este medio de transporte, cifra que pone de manifiesto la importancia de la cadena logística y de la labor desarrollada en los recintos portuarios para impulsar la competitividad de sus territorios.
En este contexto el Puerto de València es un nodo fundamental de conexiones logísticas internacionales al servicio de las empresas. El primer puerto del Mediterráneo en tráfico de contenedores. Una plataforma conectada con unos 1.000 puertos de todo el mundo por la que transita el 36 % del comercio de importaciones y exportaciones de la economía española.
El futuro inmediato de la logística va estar condicionado por muchos aspectos: por un lado, a los cambios regulatorios y de gobernanza portuaria, y por otro, a la conectividad de los puertos de España como base para posicionarnos como la plataforma logística del sur de Europa.
Además, el momento disruptivo que vivimos, con la transformación tecnológica que se está? generando en el sector de la industria, la logística, el transporte y los puertos, aportará nuevas formas de comunicación y oportunidades de negocio. En este contexto, la tecnología del Blockchain está llamada a jugar un papel fundamental en el sector de la logística, permitiendo la gestión segura y distribuida de las transacciones.
Esta nueva tecnología permite crear registros o bases de datos mucho más eficientes y eliminar intermediarios en sectores donde los negocios necesitan compartir información y transacciones de forma segura.
Se trata de un movimiento tecnológico tan transcendental en todos los ámbitos del transporte, que la Comisión de Puertos de Cámara España, que en la actualidad presido, uno de los foros más importantes que integran a todos los actores de la cadena logística, decidió organizar un simposio sobre el impacto del Blockchain en el sector logístico. Los expertos compararon la nueva tecnología con hitos como la integración de los ordenadores en el uso doméstico o el desarrollo de Internet, es decir, un sistema que cambiará nuestra forma de entender los negocios en la era de la digitalización.
Tenemos la responsabilidad de incorporar esta tecnología al sector de la logística ya que se adapta perfectamente a la cadena de suministro y a las necesidades empresariales del comercio internacional, actualmente centradas en la transparencia y seguridad, la automatización, la posibilidad de auditar los datos por parte de terceros y las soluciones escalables. Todo ello sin olvidar la necesidad de conectar las fachadas marítimas de España, sus puertos, con los nodos y plataformas logísticas del interior, fomentando la conectividad e intermodalidad, la transparencia en los Puertos, su competitividad (tasas portuarias) y una nueva gobernanza.
