Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Navieras

Las compañías asiáticas toman el control de los grandes puertos europeos

La multinacional china Hutchinson, concesionaria de la principal terminal de contenedores del Puerto de Barcelona, compra a Maersk su concesión en Rotterdam Cosco controla València y El Pireo

Vista general de una de las terminales de contenedores en el Puerto de Rotterdam. levante-emv

Nuevo golpe de timón de las multinacionales asiáticas en el negocio de los grandes puertos de Europa. APM Terminals -que forma parte del conglomerado de negocios marítimos de la mayor naviera del mundo, la danesa Maersk- acaba de anunciar que ha vendido su instalación de contenedores del Puerto de Rotterdam al Hutchinson Ports, compañía con cuartel general en Hong Kong y segunda firma en el «ranking» del sector después de Cosco, el gigante estatal chino líder mundial en el tráfico marítimo de contenedores.

Hutchinson tomará el control del 100 % de la instalación que posee APM-Terminal en el citado emplazamiento portuario del viejo continente. Además, este operador asiático, a través de su filial Hutchinson Ports BEST, explota la infraestructura más importante del Puerto de Barcelona. Inaugurada en 2012 tras el proceso de ampliación del recinto barcelonés, gestionó 2,4 millones de contenedores (unidades de veinte pies o TEU). Está dotada con grúas semiautomatizadas para ahorrar costes laborales.

Hutchinson Ports se ha comprometido a no realizar ningún despidos entre la plantilla de estibadores en los cuatro años siguientes a la formalización de la venta.

Dominio asiático

Mientras tanto, Cosco, propietario de la principal terminal de contenedores del Puerto de València, avanza en su expansión. Cosco Shipping Ports adquirió a Noatum sus terminales en Bilbao y València, instalaciones que registraron un volumen de 3,6 millones de contenedores en 2018. Cosco, presente en España desde 1973, posee más de 46 terminales de contenedores en todo el mundo, con un movimiento que al cerrar este ejercicio alcanzará los 90 millones de TEU. La compañía es, actualmente, la cuarta naviera del mundo en tráfico de contenedores con 311 buques y líder mundial en buques de breakbulk (carga general).

El dominio de las firmas del lejano oriente en el ámbito portuario europeo avanza con esta nueva operación en el mencionado enclave del norte de Europa. Entre los tres gigantes de las terminales marítimas (Cosco, Hutchinson Ports y PSA International) controlan una cuarta parte de los movimientos de contenedores de todo el mundo. Cosco explota el Puerto de El Pireo (Grecia) y logró una cifra de 105,8 millones de TEU en 2018 (13,5 % de cuota de mercado). Cosco pretende aumentar la capacidad de la terminal CSP Iberian Zaragoza Rail Terminal y prevé realizar inversiones en los próximos años para duplicarla hasta los 330.000 TEU anuales a partir de 2022, según las previsiones realizadas el pasado mes de noviembre por el nuevo máximo responsable de Cosco Shipping Ports, Zhang Dayu durante la reunión que mantenida en Shanghai con el presidente de la Autoridad Portuaria de Valencia (APV), Aurelio Martínez. La segunda del «ranking» de terminales es Hutchinson, que consiguió 82,6 millones de TEU (es decir, el 10,5 % del total) mientras que PSA Internacional (de Singapur) es tercera. Alcanzó 80,1 millones (10,2 % de cuota). APM Terminals es cuarta con 78,6 millones de contenedores y DP World (con sede en Emiratos Árabes Unidos), situada en quinto lugar con 70 millones y una cuota del 8,9 %.

TIL-MSC, sexta del mundo

En esa batalla por el control de los negocios marítimos la primera firma europea es Terminal Investments Limited (TIL), con 47,7 millones y un 6,1 % de la actividad global. Esta multinacional de Suiza está participada por la naviera Mediterranean Shipping Company (MSC), principal cliente de Valenciaport y aspirante a la adjudicación del proyecto de construcción y explotación de la cuarta terminal de contenedores, donde se prevé un inversión público-privada de 1.400 millones para poner en marcha la instalación de 137 hectáreas de superficie con una capacidad para albergar 5 millones de contenedores. El proceso de ampliación cuenta con el rechazo de Compromís y Podemos.

Compartir el artículo

stats